El mercado de "lujo" poco conoce sobre recesión y crisis. Es que productos como zapatos, coches, bolsos, indumentaria o viajes de alto nivel, apuntados a un grupo de mendocinos selectos -ABC1 y ABC2- resisten a la caída del consumo.
Los argentinos que integran este club claramente son muy pocos. Según datos de CCR, sólo el 5% de los hogares pertenece a este grupo con un ingreso neto promedio por familia de $ 130.000.
En el caso de ABC2, clase media-alta, el ingreso es de $ 40 mil, y acá representa el 17,4% de los hogares argentinos. Al hablar de hogares, se refiere a que todos los miembros son aportantes. Por lo general, se trata de hogares de profesionales, con cargos gerenciales y directivos, en donde ambos trabajan, especificó Patricia Sosa, directora comercial de la consultora.
De este modo es que mendocinos con salarios de cinco o seis dígitos llegan a adquirir productos “top” con la misma frecuencia que lo hacían el año pasado o el anterior. Es que para pertenecer a este grupo lo “viejo” o “pasado de temporada” no es admisible.
Obviamente, la inflación, aumento de tarifas y pérdida del poder adquisitivo no es un problema para este segmento y siguen consumiendo. Estos factores sí afectan a casi el 80% de la población argentina.
En Mendoza, a pesar de que hay diversidad de marcas de diseñadores o productos de tecnología que no llegan, este nicho está consolidado y los mendocinos con sueldos elevados parecerían responderle muy bien. Por ello es que cada día se observan nuevos proyectos y negocios orientados a productos premium.
Cabe destacar que el mercado más suntuoso no ha llegado a instalarse del todo en la provincia. Sin embargo, sí hay otras marcas y empresas que apuntan a un ABC1 de Mendoza, como Porsche en autos, Francis Mallmann en lo que a restaurantes se refiere, o zapatos Paruolo o Valdez y prendas como Maggio Rosseto, La Martina, Etiqueta Negra, entre otras tantas. Pero además, el mercado suntuario implica bienes premium en categorías como viajes de placer y servicios de bienestar.
Autos, tecnología e inmobiliaria
Así como las mujeres se rinden ante los zapatos, los hombres ABC1 proyectan su status en autos, tecnología, vinos y salidas a restaurantes de lujo, y sus ahorros en inmuebles de iguales características.
El costo de pertenecer a este grupo es muy alto y las turbulencias económicas parecen no afectar a este glamoroso mundillo de marcas de alta gama.
Eduardo Vargas, gerente de Ventas de la concesionaria Porsche de Palmares, contó que durante este año han tenido una reactivación importante de sus ventas, en comparación con 2015. "Lo que vamos trayendo se va vendiendo", destacó.
En cuanto al comportamiento del consumidor ABC1, contó que se juntan dos fenómenos en este rubro. Por un lado, “el mendocino es un apasionado de los autos de alta gama. Por ende, este consumidor está siempre buscando nuevas alternativas y va detrás de mejorar sus unidades”.
Por lo general, explicó, compra un auto cada dos años, para ir sumando la nueva versión. Pero lo que se da es que el comprador no se deshace de su modelo anterior, sino que lo conserva e incorpora el nuevo modelo. “Aspiran a tener lo último”, remarcó Vargas.
Lo último de esta marca es el Porsche Macan, que hoy está entre los 130 mil dólares la versión básica. Pero además de autos, también se destacan las motos ABC1. Acá encontramos a Ducati, por ejemplo, que en octubre abre sus puertas de la mano de Yacopini Sud, con unidades que van desde los 288 mil a los 760 mil pesos.
Asimismo, la misma concesionaria, cuenta de la mano de Adrián Yacopini con unidades de autos con foco en este público, como puede ser la Camaro Chevrolet, que tiene un valor de 110 mil dólares.
Según el empresario, Mendoza es una plaza interesante para estos vehículos, ya que hay un público consumidor. Al igual que su colega, destacó que se trata de compradores que renuevan su auto como máximo cada dos años. “Van detrás de los detalles, la tecnología y seguridad que estos modelos brindan”, explicó Yacopini.
En cuanto a la tecnología, “este segmento va detrás del último celular y el último modelo de su marca preferida”, contaron desde Claro. Sin embargo, según los especialistas, muchos optan por comprarlo fuera del país, ya que aquí hay modelos o marcas que no llegan, como es el caso de Apple.
Sin embargo, en cuanto a los modelos más caros, hoy está el LG V10 a $ 25.999, Samsung Galaxy S7 Edge a $ 17.999, Samsung Galaxy S7 a $ 12.949 y Moto X Style a $ 11.499.
Estos mismos compradores son los que adquieren inmuebles a U$S 3.000 el metro cuadrado en zonas como la Quinta o barrios exclusivos, con departamentos de lujo en el Centro de la ciudad o en Palmares.
Julián Groisman mencionó que "Presidente Inmobiliaria ha avanzado a lo largo de su trayectoria con una importante cantidad de desarrollos apuntados a una clase media con capacidad de ahorro, profesionales y empresarios e industriales".
Para este público, “siempre los ladrillos de buena calidad/ubicación son resguardo y mantiene uno el capital con una tasa de retorno razonable en cuanto a renta y más aún cuando se aprecia por una zona que empieza a tener cada vez más demanda; eso es la ganancia de la plusvalía que siempre se evalúa en el real estate”.
Es por ello que, especificó Groisman, este consumidor evalúa el proyecto por la ubicación del terreno, la arquitectura desde la perspectiva visual hasta los más mínimos detalles de los ambientes (tamaño del departamento, calefacción, insonorización, refrigeración, vistas, etc.), estructura, terminaciones, amenities y financiación.
En cuanto a lo que puede pasar con estos proyectos en un contexto recesivo, Groisman contó que, a pesar de la falta de crecimiento de la economía, “hemos seguido avanzando en nuevos proyectos y estamos viendo una mayor concreción de operaciones. Actualmente, estamos construyendo el edificio Unique en la Quinta Sección y además construyendo las Lomas en Palmares Valley, cuya arquitectura, tamaño de los departamentos, balcones y vistas hacen de estos verdaderas casas en altura. Estamos convencidos de que generaremos en esa zona un nueva concepto y estilo de vida para los que quieren vivir en edificios en propiedad horizontal”, detalló el empresario.
Calzado, indumentaria, bolsos
Zapatos de todos los colores, accesorios de la última temporada, bolsos con los colores del año, con o sin tachas, amarillo y blanco, con taco, zapatillas, camisas oversize, remeras con un solo hombro o descubiertas, o jean boyfriend, todo eso quieren en este 2016 y luego en dos meses más irán detrás de otros modelos o colores.
Bajo estos estándares se maneja la mujer en general, pero sobre todo la compradora ABC1, que es la que puede ir -por sus ingresos- detrás de las nuevas tendencias sin escalas y de marcas argentinas e internacionales, de lujo y exclusivas.
Muchas de ellas, según las consultoras, adquieren gran parte de su guardarropa en tiendas de Miami, Milán, Nueva York, París, entre otras ciudades del primer mundo, donde las marcas de los grandes diseñadores muestran las últimas tendencias. Sin embargo, para otro gran porcentaje de mujeres, como es la actual primera dama de Argentina, Juliana Awada, también van detrás de primeras marcas argentinas, que propician calidad y exclusividad, entre otras cosas.
La calle que se caracteriza por tener marcas de lujo es Arístides Villanueva. Aquí se pueden encontrar carteras Jackie Smith por $ 8.000 o $ 10.000, zapatos de Maggio Rosseto, Valdez o Paruolo por $ 5.000 o $ 8.000, jeans Paula Cahen D'Anvers a $ 2.800, camisolas a $ 2.600 o sacos Naíma a $ 6.000, entre otros.
Este es el caso del local Moht, un multimarcas que vende Jeffrey Campbell, Lazaro y Paruolo. Florencia Galigniana, propietaria de esta empresa, contó que desde hace más de 2 años están allí y este año, a pesar del contexto, las ventas se fueron manteniendo en lo que va de 2016. En cuanto a la clientela, comentó que por lo general se trata de clientes fijos que vienen una vez al mes o dos veces y se llevan hasta cinco artículos por ocasión.
Asimismo, desde Espacio Arístides, que tiene marcas como Petra, Besha, Penguin, remarcaron lo mismo, ventas que no han caído y se han mantenido. "La Arístides se ha transformado en una calle de negocios de marca, de premium. La gente sabe que acá va a encontrar lo que está buscando. Por ello, conocemos tanto a hombres y mujeres, y los llamamos cuando arriba la nueva temporada; los invitamos a lanzamientos, así ellos son parte de nuestro espacio, buscando la exclusividad".
Mencionaron que se trata de una clientela que es fanática de la moda y le encanta mirar las revistas, seguir las novedades de alta costura y conoce los colores, diseños, formas que se vienen y todas las colecciones de los diseñadores más importantes. Por ello es que desde los locales de Mendoza cuentan que buscan darle toda esa exclusividad a las marcas locales, a través de un trato más personalizado.
Según especificaron, lo que hacen también es anotar lo que cada una de las clientas se lleva, y para qué evento lo va a usar, así la persona que se lleve un modelo de vestido o conjunto igual no lo repite en el mismo lugar.
Belén Ortiz, quien es una de las socias del nuevo local de las marcas Las Oreiro y Juanita Jo, que está en La Barraca, contó que decidieron traer las marcas luego de evaluar que Mendoza podía responder. Según especificó, apuntan a un rango de edad de 20 a 60 años, activa, joven y clásica y a un ABC1 y C2, con un poder adquisitivo medio-alto, "que es la idea de la marca en sí". Frente al comportamiento de ventas, mencionó que "a pesar de la situación del país, las ventas desde que comenzó el año han ido evolucionando".
Hoy el consumidor en general está cada vez más interiorizado en la producción y materiales con los que se fabrican carteras o zapatos.
Hay tendencia a elegir productos ecológicos. Las marcas y empresas de lujo han sabido responder. Uno de los casos es el de un local ubicado en la Arístides Villanueva que se llama Nicole Lee, que vende bolsos, equipaje, marroquinería pro vegana de lujo, con precios que van entre los $ 1.500 y $ 3.000. “La respuesta de la mendocina ha sido muy positiva. Se trata de carteras con modelos exclusivos y que no se repiten”, expresó Nora Concati, del local Con cuál quedarte.
Viajes y ocio
Este tipo de consumidor que está abocado a los negocios, busca mantener equilibrio con su vida personal a través de viajes de placer, a lugares y sitios inhóspitos, hoteles chicos, de lujo, con detalles y atención personalizada.
Por ejemplo, desde Vinea Viajes contaron que este tipo de clientes viaja en primera clase a destinos más exóticos como Dubai. Por lo general, van en pareja, raramente en familia. En promedio se gastan U$S 5.000 (76.000 pesos) por persona en vuelos y U$S 2.500 (38.000 pesos) en alojamiento. Lo que se traduce en un paquete de más de $ 114.000. A su vez, también para estos hay cruceros exclusivos que dan la vuelta al mundo y cuestan U$S 30.000, ósea 456 mil pesos.
Además, desde Mascareña Viajes, contaron que por lo general este público viaja por lo menos tres veces al año. Entre las características distintivas, comentó que son personas que buscan hoteles exclusivos, lujosos, y que sean pequeños.
Van detrás de la tranquilidad del lugar y con atención personalizada. Todo esto, lo consiguen por lo general en islas muy pequeñas, que sólo se llega a través de vuelos privados.
Es así que especificaron desde la empresa, que una persona puede gastar $ 124.000 sólo en pasajes a sitios como Barbados, Los Roques, Holbox o a Puerto Rico, en donde un paquete está arriba de los U$S 7.000, con pasajes y hotel cinco estrellas como el Renaissance.
No obstante, desde esta agencia acentuaron que más allá de sus gastos de lujo, también son racionales a la hora de comprar. Por ejemplo, “usan sus millas, tarjetas con descuentos y hoteles en donde los precios están acorde a su calidad”.
El comprador mendocino
Más allá de este consumidor ABC1 que no ha relegado del todo sus compras, las empresas locales destacan que durante este año han tenido un comportamiento más racional. En esto, lo que quiere decir Patricia Sosa, de la consultora CCR, es que se ha volcado a comprar inteligentemente en algunos rubros para no relegar sus compras aspiracionales y de marca.
“Desde el lado del consumo, son prudentes. Ahorran en consumo masivo, para luego darse gratificaciones que no quieren perder, como salidas al cine, vacaciones, cambio de vehículo, educación de sus hijos en colegios privados, indumentaria y calzado, entre otras”, expresó la especialista.
Al igual que el resto de los hogares, Sosa explicó que este consumidor mira ofertas y promociones a la hora de comprar, o sea, “no derrocha su dinero en precios de alimentos, limpieza e higiene. Sabe, que puede adquirirlos más económicos, y ellos consideran que es una compra inteligente”, destacó.
Al tiempo que adelantó que se animan a decir que van a mayoristas, recorren espacios de cercanía, entre otros. Además, traccionados por ofertas, cuentan que van a carnicerías y pollerías, así como a mercados cooperativos a comprar frutas y verduras. En estos casos, mencionan que asisten por una cuestión de ir detrás de lo fresco, “pero sabemos que también van detrás del precio”.
Es así que, a pesar de que en este rubro compran de manera más inteligente, en lo que tiene que ver a otras categorías su consumo sigue siendo aspiracional, de experiencia y para nada austero, según determinó la especialista de CCR.