La energía solar es la energía obtenida a partir del aprovechamiento de la radiación electromagnética procedente del Sol. Además, se trata de una energía sostenible e inagotable que, aunque pueda parecer mentira, puede hacernos ahorrar dinero. E aquí unos consejos para aprovechar la luz solar:
Si las ventanas de casa están orientadas al sol, no bajés las persianas o los estores. Dejá que entre la luz natural. De este modo, si tenés muebles, decoración, suelo o paredes de colores oscuros, estos absorberán el calor durante el día y por la noche irradiarán el calor almacenado.
Pese a que la mayoría de los hogares ya disponen de tendedero propio, lo ideal es tender la ropa en las típicas cuerdas de antaño que van de ventana a ventana.
Tendiendo fuera no sólo las telas se secarán mejor, sino que mantendrán el olor a jabón y ahorrarás energía de la secadora al suprimir esa función del programa.
Adquirí sistemas solares para cargar aparatos electrónicos pequeños, como el celular, el reproductor de música o cualquier aparato portátil.
Instalá un calentador de agua solar. Aunque dependiendo del tipo de hogar, esto puede resultar más o menos difícil, calentar agua representa el 30% del consumo doméstico de energía.
Si disponés de jardín, podés optar por la iluminación exterior solar, pues no tiene cables y capta los rayos solares durante el día para iluminar durante la noche.
Aprovechar la energía solar en el hogar es una excelente medida para cuidar el medio ambiente y ahorrar dinero en el proceso.