El Papa Francisco, a un año de su octava década, cuenta con varios problemas de salud que, aún así, no le impiden ser uno de los líderes mundiales más influyentes y mantener una agenda muy ocupada promoviendo su mensaje.
En uno de sus discursos no titubeó al pedir a sus seguidores, de forma en parte seria y en parte jocosa, “recen por mí. Estoy un poco anciano y un poco enfermo, pero no mucho eh”. Aquí detallamos algunos de sus problemas de salud conocidos a la actualidad.