Sociedad
No es cosa de hombres: la historia de Nina, la primera conductora de micros de larga distancia
hace 7 horas
Una mujer de Bariloche de 22 años, cuyo secuestro en el centro de la ciudad fue denunciado ayer al mediodía, apareció hoy en buen estado de salud pidiendo ayuda alrededor de las 11 en un asentamiento precario cercano, y fue rescatada por un taxista que la llevó hasta un supermercado, desde donde la trasladaron en ambulancia con fuerte custodia policial, informó hoy una fuente judicial.
El secuestro generó una gran conmoción en la ciudad y un amplio despliegue policial en distintos barrios, e incluyó anoche un allanamiento en la zona sur, donde secuestraron un vehículo, pero hasta el momento no hubo detenidos.
Se trata de Cintia Belmar, quien según la primera denuncia anónima de ayer al 911, poco después ratificada por familiares, fue obligada por dos hombres a subir a una camioneta roja cuando iba a buscar a su hijo al jardín de infantes de la Escuela 16, en Elflein y Palacios, a seis cuadras al sureste del Centro Cívico.
Según el relato de los familiares a la policía, la joven logró poco después hablar con su madre y su novio, en dos breves comunicaciones por celular aprovechando descuidos de sus captores, quienes al parecer luego le quitaron el teléfono y comenzaron a enviar mensajes falsos, incluyendo posteos en perfiles suyos en las redes sociales, asegurando que estaba bien y que no la busquen.
"Todos estamos desesperados por tener algún dato, la policía y el Ministerio Público Fiscal están haciendo un excelente trabajo desde ayer y trabajaron toda la noche sin descanso", había expresado esta mañana el ministro de Seguridad de Río Negro, Gastón Pérez Estevan, quien viajó a Bariloche para ponerse al frente de la investigación.
El ministro informó que están empleando "la mejor tecnología" para investigar las comunicaciones y los mensajes desde el móvil, así como su "georreferenciación", pero evitó comunicar másdetalles "para no entorpecer la investigación, que está en sus primeras 24 horas".
La investigación está a cargo de la fiscal Betiana Cendón, de la Unidad de Delitos contra las Personas, quien siguió las diligencias junto al personal judicial y jefes policiales, y esta mañana confirmó a FM Bariloche que Cintia había aparecido en buen estado de salud.
Según el relato del taxista Antonio González a la misma emisora, la joven salió de "uno de los pasillos del (barrio) Diez de Diciembre gritando y agitando los brazos, y subió al taxi llorando sin hablar".
"La reconocí por la foto que publicaron por todos lados. Se tapaba la cara, lloraba y no me contestaba, entonces decidí llevarla La Anónima (a dos cuadras del lugar), y pedir a seguridad que llame a la policía y una ambulancia", relató el taxista.
En medio de un revuelo por la presencia de decenas de policías, curiosos y personal del supermercado, la víctima fue subida a una ambulancia privada y pasada a otra del hospital zonal, a donde la trasladaron para brindarle las primeras atenciones médicas.
Fuentes de la investigación informaron que intentarían obtener su declaración apenas los médicos lo autorizaran, y que entre las hipótesis que se manejan una está vinculada a amenazas de una ex pareja suya, quien tenía una "restricción de acercamiento" ordenada por la justicia, y otra a actividades del narcotráfico en la ciudad.
Poco antes de la denuncia, ayer a la mañana el colectivo de lucha contra la violencia de género Mala Junta había informado que el sábado a las 9 la Cámara Laboral de Bariloche convocó a autoridades municipales y del gobierno de Río Negro para exigirles respuestas ante la demanda de prevención de secuestro de mujeres, y otros casos de violencia de género.
La medida judicial fue en respuesta a un "hábeas corpus preventivo y colectivo", interpuesto por 300 mujeres, basado en la denuncia de meses atrás de dos casos, en los que las víctimas pudieron escapar, pero la posterior investigación judicial y policial no logró resultado alguno.
"En nuestros colectivos recibimos muchos comentarios de otros hechos, intentos de secuestros que no se animan a denunciar", señaló la denunciante Marina Schiffrin , destacando que además está el caso de Micaela Bravo, una mujer de 28 años "con tres hijos-, que el año pasado fue subida a un auto y apareció muerta 15 días después, crimen impune y nunca esclarecido.
