La Corte provincial confirmó la prisión perpetua contra Alejandro Amitrano (42), quien fue condenado por el asesinato de Belén, su pequeña hija, ocurrido en 1999.
La muerte de la pequeña de un año de edad es uno de los casos policiales más recordados de la provincia, no sólo por la violencia del homicidio -fue calificado con el agravante de la alevosía- sino porque Amitrano pasó 13 años en calidad de prófugo.
En noviembre de 2014, Alejandro Amitrano fue condenado a prisión perpetua por el delito de homicidio agravado por el vínculo y por alevosía.
El falló, firmado por los jueces Rafael Escot, Alejandro Gullé y Liliana De Paolis, terminó en la Corte local, luego de que los defensores casaran la sentencia.
Ayer, la sala penal de la Corte -conformada por Omar Palermo, Alejandro Pérez Hualde y Mario Adaro- confirmó la sentencia de la Quinta Cámara del Crimen.
La decena de puntos cuestionados por los defensores del condenado fueron rechazados por la Corte.
Entre ellos la violación de garantías constitucionales, la violación de la defensa en juicio y privación ilegítima de la libertad.
Según la necropsia, Rosario tenía 5 fracturas costales de origen traumático y signos de haber sido golpeada en la cabeza. El golpe que le produjo la muerte fue realizado con un puño o pie o codo que dio contra el abdomen de la niña con una fuerza tal que hizo que el intestino explotara contra la columna vertebral.
Para los abogados de Amitrano, no se pudo probar en el debate que fuera un golpe de la víctima la causa de la muerte y bien podrían haber sido por la caída de una bicicleta o de la cama.
Para la Corte "las pretendidas hipótesis aludidas por la defensa no pude ser calificadas como alternativas racionales".
Un largo viaje
Tres días antes de que la niña muriera (falleció el 30 de noviembre de 1999) Amitrano desapareció de Mendoza. El prófugo fue buscado algunas veces en Villa Mercedes, San Luis, donde había nacido, pero es probable que el hombre ya estuviera en alguna provincia argentina, o en Brasil o Bolivia. Es que su familia tenía un nivel económico que le permitió moverse sin inconvenientes.
Pero cinco años atrás se instaló en Paraná, Entre Ríos, donde tenía un minimarket y una nueva pareja, una mujer que estaba embarazada al momento de ser detenido.
La descubrieron en enero del año pasado, cuando un policía de San Luis relacionado con la familia Amitrano, le pasó un dato al periodista local Marcelo Ortiz, quien a su vez transmitió la novedad al ministerio de Seguridad.
El operativo fue simple, los investigadores siguieron a la madre de Amitrano desde San Luis hasta Paraná. Allí fue detenido y luego trasladado a Mendoza, donde la fiscal especial Claudia Ríos lo imputó por el homicidio de su pequeña hija.
Fechas clave
20/11/99. Rosario Belén Amitrano, de apenas un año de vida, es internada por golpes severos en el cuerpo.
30/11/99. La niña muere tras días de agonía.
07/12/99. Alejandro Amitrano, padre de la niña, se fuga de la provincia después de hablar ante los medios de su "inocencia".
26/12/99. Cecilia Coseau -madre de Belén- es detenida acusada de abandono.
11/04/01. Coseau es absuelta ya que se consideró que no tuvo participación en el asesinato.
07/01/13. Tras 13 años de prófugo, el sospechoso es detenido en su casa de Paraná, Entre Ríos. Usaba otra identidad y tenía una nueva familia.
10/11/14. Amitrano es condenado a prisión perpetua por homicidio agravado por el vínculo. Su defensa apeló la decisión.
22/11/16. La Corte provincial ratifica la sentencia impuesta al acusado.