La Cámara Federal de Casación Penal confirmó una condena a 7 años y medio de prisión al ex presidente Carlos Menem en la causa por la venta ilegal de armas a Ecuador y Croacia.
La histórica decisión fue tomada por la sala de ese tribunal integrada por Ana Figueroa, Angela Ledesma y Juan Carlos Gemignani en una causa iniciada en 1995 en base a una investigación del diario Clarín.
Para un sector de la Justicia la condena debería quedar firme ya, pero Menem apelará a la Corte Suprema de Justicia para no empezar a cumplir ahora la condena, como arresto domiciliario porque tiene más de 70 años.
El gobierno de Macri mandará un proyecto de ley al Congreso para que las condenas sean de cumplimiento efectivo a partir de la sentencia del tribunal oral pero no servirá para este caso. Menem había sido sentenciado en el 2013 pero la mayoría kirchnerista del Senado rechazó sacarle los fueros para que cumpla con la condena.
La semana pasada, Menem anunció que buscará una tercera reelección como senador por La Rioja.
En junio del 2013, el Tribunal Oral en lo Penal Económico Nº 3 fijó la condena a Menem por este caso, aunque está procesado en otros como la causa por los sobresueldos.
En marzo de ese año la Cámara Federal de Casación había revocado una polémica absolución y le ordenó al tribunal fijar penas de entre 4 y 12 años por el delito de contrabando agravado de armas de guerra. El voto de Gemignani fue clave en ese momento. Menem estuvo ausente en la audiencia: presentó un llamativo certificado médico que alegaba “hipertensión arterial, diabetes y angustia”. Entre 1991 y 1995, Menem permitió el desvió de 6.500 toneladas de armas a Ecuador y Croacia, países que estaban en guerra y con embargos de armas internacionales.
Hasta el 2013, el kirchnerismo bloqueó la posibilidad del desafuero y no se sabe qué hará ahora. El tribunal oral también fijó una pena de 5 años y 6 meses para el ex ministro de Defensa Oscar Camilión y de 4 años para el traficante de armas Diego Palleros. Camilión falleció recientemente.
En el caso de Menem, el TOF 3 tuvo en cuenta como agravantes que el ex mandatario “dañó la imagen internacional del país” y puso en riesgo la vida de los cascos azules argentinos que estaban en la ex Yugoslavia. También consideró la calidad del material bélico (no solo eran armas de fuego, sino también cohetes Pampa y misiles antitanques), que en el contrabando hubo un “fin de lucro”, en alusión al pago de sobornos, y que al momento del hecho el ex presidente no tenía dificultad para su sustento.
Como atenuantes, el Tribunal tuvo en cuenta la edad de Menem, su precario estado de salud, que no registra antecedentes y el largo tiempo que duró la causa, 18 años. Hace una semana, el fiscal Marcelo Agüero Vera había solicitado una pena de 8 años de prisión efectiva igual que su antecesor Mariano Borinski.
La condena a Menem incluye la pérdida de todos los privilegios y prerrogativas, 3 años de inhabilitación para ejercer el comercio, 14 años de inhabilitación para ejercer como funcionario o empleado público, la inhabilitación total para integrar las fuerzas de seguridad y para ejercer la patria potestad. Además, el tribunal instó al Congreso a iniciar el proceso de desafuero.
Para Camilión, el TOF 3, integrado por Luis Imas, Luis Losada y Jorge Pisarenco, fijó una pena de 5 años y 6 meses de prisión en base a similares agravantes y atenuantes. La tercera condena más grave fue para el ex coronel del Ejército Diego Palleros, quien recibió una pena de 5 años.
Además, los jueces ordenaron incautar las coimas que recibieron de Palleros cinco ex funcionarios mediante transferencias bancarias. Son casi 900 mil dólares.
A Carlos Haroldo Fusari, Carlos Alberto Nuñez, y a Julio Jesús Sabra le decomisaron US$ 107.500, mientras que a Luis Sarlenga y a Edberto González De la Vega otros US$ 275.000 a cada uno. Ese dinero deberá abonarse en “moneda nacional” en un plazo de diez días a partir de que se confirme el fallo.
El escándalo por la venta ilegal de 6.500 toneladas de armas y municiones a Ecuador y Croacia fue revelado en 1995 por Clarín que descubrió que su gobierno había firmado tres decretos secretos con destinos falsos a Panamá y Venezuela, entre otras irregularidades. En 2011, Menem y los otros 17 acusados habían sido absueltos por el TOF 3, que entendió por dos votos a uno que la venta de armas fue una “decisión de política exterior y un acto político no judiciable”. Pero en marzo de ese año la Cámara de Casación dio un vuelco en la causa.
En base a la investigación de Clarín, Ricardo Monner Sans abrió la causa original y el fiscal que investigó la causa durante la instrucción, Carlos Stornelli. Ahora Monner también busca la condena de Menem por la voladura de la fábrica militar de Río Tercero en 1995.
Exhumaron los restos de Carlitos Jr.
Los restos del hijo del ex presidente Carlos Menem, que murió en 1995 al caer el helicóptero que piloteaba en cercanías de la ciudad bonaerense de Ramallo, fueron exhumados ayer en el cementerio islámico de La Tablada para determinar si fueron cambiados para encubrir un supuesto asesinato.
La orden fue del juez de San Nicolás Carlos Villafuerte Ruzo, a partir de una petición de Zulema Yoma, madre de Carlos Menem hijo.
El juez encabezó las diligencias, que se iniciaron en la necrópolis situada en el partido bonaerense de La Matanza y continuaron en la Morgue Judicial porteña, ubicada en la calle Junín 762 de esta capital.
“Se va hacer un cotejo de ADN de los restos, en concreto el cráneo y algunas partes del cuerpo, con las muestras de (la madre) Zulema Yoma y (el padre) Carlos Saúl Menem para saber si el cuerpo enterrado es de Carlitos”, afirmó a los periodistas el abogado Diego Storto, letrado de la ex esposa del ex Presidente.
Villafuerte Ruzo había archivado el expediente por considerar que Carlos Jr. murió en un accidente aéreo pero Yoma, que cree que los restos fueron cambiados para encubrir supuestos balazos, recurrió a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), que en 2012 resolvió que debía realizarse una nuevo estudio de ADN.
El hijo de Menem murió el 15 de marzo de 1995 al caer el helicóptero que piloteaba a metros de la ruta 9, en jurisdicción de Ramallo, junto a su acompañante, el piloto automovilístico Silvio Oltra, con quien se dirigía a una carrera de TC 2000 en Rosario. Yoma siempre sostuvo que el siniestro aéreo en el que murió su hijo fue un “atentado” e incluso asegura que el cadáver fue profanado y sospecha que el cráneo pertenece a otra persona.