Después de que el rumor de que Antonio Gasalla abandonaría su participación en el ciclo de Susana Giménez, él mismo lo confirmó en una charla telefónica con Marcelo Polino, minutos antes de salir al aire por Telefe con la diva. "No hay que sorprenderse tanto... el puntal es Susana", dijo sobre su partida.
En la entrevista para "Ponele la firma", el capocómico contó que su contrato tiene una cláusula que le permite dejar su lugar cuando él lo necesite y que lo hará ahora para aprovechar una oportunidad laboral en el exterior.
"Tengo una oferta desde hace varios años para hacer un espectáculo en Nueva Jersey, que tiene la comunidad de argentinos más grande de todo los Estados Unidos, obviamente que viven pendiente de lo que hacemos acá, en televisión (...). Este año hice el contrato con la opción de irme en este momento porque tengo que caer allá cuando se está formando la temporada, a la inversa que acá".
En cuanto a su decisión, reveló: "Con Susana no hablé. No se habla mucho con Susana tampoco. Ella está en su camarín, la están peinando, la están maquillando; yo estoy en el camarín mío, poniéndome la peluca y cuando nos vemos, nos vemos frente a cámara". Y aclaró que la producción ya sabía de su situación: "Tengo una cláusula en el contrato que digo que yo puedo irme en este momento, aceptada por ellos. Los contratos son de a dos".
Gasalla también se prestó a hablar sobre su relación con Fátima Florez. Él remarcó que su salida del programa nada tiene que ver con su colega: "Yo no estoy para tener un problema actuando o para no poder resolver una situación, yo no tengo nada que ver". Pero después reconoció un inconveniente entre ambos en el primer sketch de la temporada: "Ella habló prácticamente todo el espacio que tenía para hacer la empleada pública".
"La empleada se va con mi contrato", remarcó Gasalla. Y justamente llamó la atención este último domingo que su personaje Flora tuviera poca participación en la charla con Felipe y Tamara Pettinato. Es más, al final de la ficción, a Antonio lo levantaron del aire sin dejarlo cerrar con su tradicional "se van para atráaaaaaassss".
