La Primera Cámara del Crimen resolvió hoy condenar a 10 años de prisión a Fernando Fernández (41) por tentativa de femicidio.
El médico, ex jefe de terapia intensiva del hospital Central, apuñaló a su esposa Rosana Sosa (44) en 2015 en la casa en la que vivían ambos.
El juicio empezó el lunes 30 de octubre y en los alegatos el fiscal de Cámara Fernando Guzzo pidió una condena de 15 años de prisión por el delito de "tentativa de femicidio doblemente agravada por el vínculo y por ser en contexto de violencia de género", los abogados querellantes Viviana Beigel y Pablo Salinas pidieron 20 años de cárcel y el abogado defensor Marcelo López pidió el cambio de figura legal basándose en la emoción violenta y adelantó que apelará la sentencia.
El caso
El 16 de noviembre de 2015 una discusión doméstica en la habitación matrimonial que la pareja compartía en un departamento en Las Heras terminó con Rosana acuchillada.
Según se expuso durante el juicio, Fernandez se enojó porque la mujer se había hecho un tatuaje de tres pájaros que representaban a sus hijos. La pelea verbal terminó cuando el hombre tomó un cuchillo de cocina y atacó a Sosa, asestándole cinco certeras puñaladas: dos en el tórax, una en la espalda, otra cerca de la zona hepática y la última en la ingle.
Fernández, tras la agresión, se escapó de su casa en su auto, mientras su mujer salió de departamento y logró pedir ayuda a los vecinos, quienes la llevaron al hospital Carrillo de Las Heras. Frente a gravedad de cuadro, fue trasladada al Lagomaggiore, donde quedó internada. Estuvo tres semanas en terapia intensiva.
El médico llegó a su oficina, le contó a un colega lo sucedido y luego se tomó una importante cantidad de psicofármacos por lo que fue internado. Después de pasar algunos días internado en el Central fue traslado al pabellón judicial del hospital El Sauce y luego de tres semanas ingresó al penal de Boulogne Sur Mer.
El 31 de octubre de 2017 empezó el juicio que terminó hoy con la sentencia a 10 años de prisión para el acusado.
Debate
El 31 de octubre de 2017 empezó el juicio, que terminó hoy con la sentencia a 10 años de prisión para el acusado.
Durante la primera jornada del debate la víctima, la enfermera Rosana Sosa (44), contó cómo el padre de sus tres hijos tomó un cuchillo y la apuñaló cinco veces, dejándola un mes y un día internada, 10 de ellos en terapia intensiva.
Según el relato de la mujer, Fernández la atacó cuando le contó al galeno que se había hecho un tatuaje.
"Todo empezó la noche anterior, cuando le dije que me había hecho un tatuaje de tres pájaros que representan a mis hijos", explicó la enfermera, negando la versión del imputado en la que el móvil del ataque fue que ella golpeó a uno de sus hijos.
En la segunda jornada del debate contra el médico Fernández declaró el psiquiatra del imputado y aseguró que se trata de "una persona valiosa". "No es un criminal sino que tuvo una reacción emocional motivada", dijo.
El psiquiatra Juan Carlos Bacha, contratado por la familia de Fernández para que lo asistiera en el penal de Boulogne Sur Mer, dio un diagnóstico opuesto a los peritos del Cuerpo Médico Forense y aseguró que su paciente vivió un "trastorno mental transitorio" al momento de atacar a su pareja.
"Perdió lucidez y noción del bien y del mal. Hizo cosas impensables para una persona como él. Cuando lo atendí se mostró profundamente arrepentido", culminó el perito de parte.