La mañana de este domingo encontró al seleccionado argentino entrenándose a puertas cerradas en el Complejo "Cidade do Galo", el lugar de concentración en Belo Horizonte. Luego de la práctica, el plantel almorzó y después comenzó a prepararse para el viaje a San Pablo. El vuelo chárter tiene horario de salida a las 19.30 y desde el aeropuerto la delegación viajará en ómnibus hasta el hotel Pullman Ibirapuera, donde se hospedará.
Sin poder observarse la práctica, al menos las señales recogidas fueron tranquilizadoras. Por un lado, porque Ezequiel Lavezzi está prácticamente confirmado para el partido del martes próximo, frente a Suiza, por octavos de final. Por el otro, debido a que Sergio Agüero mejora de su lesión muscular y por tal motivo volvió a hacer un trabajo leve de campo, a diferencia de las rutinas de gimnasio y cinta que había realizado en días anteriores.
"Pocho" se vino moviendo en las prácticas de fútbol formal como un atacante que se desdoblaba en punta y volante suelto por derecha, además. Una tarea que no le es desconocida, ya que Alejandro Sabella lo probó durante el último tramo de las eliminatorias en esa doble función. Así, el atacante del Paris Saint Germain colabora en faz defensiva como primera línea de presión sobre la salida rival y luego parte hacia posiciones de definición lanzado en velocidad.
Con Lavezzi en cancha, la Selección puede pararse alternativamente con un 4-3-3 y un 4-4-2 casi naturalmente. Tanto Messi como Higuain contarán así con más libertad para moverse en el ataque y sabiendo que puede haber cambio de ritmo con una descarga rápida hacia el ex delantero de San Lorenzo.
Respecto del Kun, la evolución de su lesión en el bíceps femoral izquierdo se va dando a pasos agigantados. El cuerpo médico le cambió el trabajo diferenciado y hoy se lo observó trotar en el predio del Atlético Mineiro de manera liviana. No habría de qué sorprenderse si Argentina gana en el Arena Corinthians y el delantero de Manchester City pueda tener chance de jugar los cuartos de final en Brasilia.
