Con la pasión de los Caudillos

En 1977, la Lepra (con Cúper y Cabrero como refuerzos) jugaba su cuarto Nacional y cumplía una muy buena labor. De hecho, se mantuvo invicto hasta la quinta fecha y finalizó segundo en su zona con el mismo puntaje que San Lorenzo.

Con la pasión de los Caudillos

Después de tres temporadas sin poder representar a la provincia en la elite del fútbol argentino, Independiente Rivadavia lograba el campeonato de la Liga Mendocina en 1976 y se clasificaba de manera directa para el Torneo Nacional del siguiente año.

El arquero José Alberto Febre (Godoy Cruz), el defensor Miguel Ángel Villegas (San Martín), los mediocampistas Raúl Rodolfo Zolorza (Atlético Argentino) y Francisco Nicolás Monárdez (San Martín) y el delantero Andrés Ángel Molina (Atlético Argentino) y el delantero Luis Eduardo Ruiz (Guaymallén) se sumaron para reforzar al equipo dirigido por Miguel Ángel “Cholo” Converti.

Independiente hizo una larga pretemporada y disputó algunos amistosos antes de la temporada (San Martín de Tucumán y Gimnasia, entre otros).

Debido a que el Metropolitano 1977 que ganó River Plate fue uno de los más largos (hubo 23 equipos, se jugaron 46 fechas, comenzó el 20 de febrero y terminó el 13 de noviembre) el campeonato Nacional comenzó más tarde de lo habitual y se extendió hasta el 25 de enero de 1978.

En la previa había esperanza. Es que en el mundo Independiente entendían que la zona que le había tocado en suerte a los azules no tenía demasiados equipos de renombre, excepto San Lorenzo.

El debut fue un empate (1-1) ante San Martín en Tucumán, la tarde en la que Eduardo Montilla atajó un penal faltando dos minutos para el final. Ese día, ‘Cholo’ Converti y Juan José Pizzuti, dupla ofensiva de Banfield en 1948, se volvieron a encontrar en La Ciudadela y no se pudieron sacar ventajas.

A la fecha siguiente, el Azul igualó con el Lobo platense (1-1) en el Gargantini. Y en la segunda salida del torneo, el equipo derrotó a Banfield (2-1) como visitante y demostró que estaba para más. A la semana siguiente, el 2-1 sobre Newell’s dejaba al equipo puntero e invicto. Y el punto de mayor nivel en el torneo se dio cuando en la quinta fecha goleó a Estudiantes de Caseros 3 a 1 en Buenos Aires.

Después de ello, el equipo tuvo un bajón. Dos derrotas al hilo (San Lorenzo y Nicanor Otamendi), dos empates y la vuelta al triunfo en la décima fecha frente al Taladro. Tras cartón fue derrota en Rosario, triunfo ante Estudiantes, empate ante el Ciclón y goleada a los marplatenses para redondear un muy buen torneo.

Dos perlas del torneo

Como en cada torneo Nacional, Los Andes acompañó al representante mendocino.

Triunfazo ante Newell’s (2-1), punta e invicto a salvo. Fue por la cuarta fecha.

Tremenda victoria ante Banfield (3-2) en La Catedral, al que ya había derrotadoen Buenos Aires.

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