Poco, muy poco en debate. El martes, el Senado exhibía algunas bancas vacías y dos temas de relevancia. Además, se trató una ley para poner nombre a una calle de General Alvear que, a partir de la publicación de la norma, se llamará Madre Teresa Ostrowsky. En Diputados ayer ni siquiera hubo sesión. Hubo tres llamados y a las 11.30 se declaró caído el tradicional encuentro de los miércoles de la Cámara baja.
Los martes le toca al Senado. Allí hubo dos proyectos de ley; el del nombre de la calle de Alvear y el otro referido a una modificación en la constitución del directorio de la Caja de Previsión de los profesionales del arte de curar. La votación fue un trámite. Así es que la sesión demoró más en arrancar que en desarrollarse.
En el Senado hubo además un adelanto acerca de un tema vinculado a la última zozobra institucional en la Cámara alta, cuando casi se desata el escándalo en la votación del acuerdo para nombrar a Miriam Gallardo en la Suprema Corte. Parece haber acuerdo para dar una solución rápida que dificulte futuros bochornos, mientras se espera una futura enmienda constitucional para que las votaciones dejen de ser secretas.
Nadie sabe por qué las sesiones son secretas, porque la Constitución dice que la votación lo es, pero puede votarse en secreto aun cuando haya prensa en el recinto. Es una vieja costumbre que los senadores se encierren y que sólo ellos sepan lo que pasa adentro.
En lo que parece haber acuerdo para avanzar es en la modificación del reglamento que propuso el radical Juan Carlos Jaliff, propuesta que fue detallada por Los Andes en su edición del martes. En lugar de que los senadores voten con dos bolillas, una blanca y una negra, que lo hagan con una sola bolilla colocándola en una urna doble: de un lado es voto positivo, del otro negativo.
Cómo está prohibido tratar esas modificaciones sobre tablas, ayer se aprobó el despacho de la comisión de Legislación y Asuntos Constitucionales y el martes que viene el proyecto final llegará al recinto para ser debatido.
Así transcurrió la sesión de Senado previa a las primarias abiertas, simultáneas y obligatorias del domingo próximo. Los diputados ni siquiera se sentaron en las bancas. La atención está tan concentrada en esa fecha electoral que ni siquiera se ha hablado de las renovaciones de cargos legislativos que vencen a fin de este mes.
Hay poco en debate y hay razones para ello. Por un lado, la proximidad de las elecciones; algunos legisladores están en campaña y la mayoría tiene alguna responsabilidad electoral.
Por el otro, se está sobre el final del período de sesiones extraordinarias. Cada año, la Legislatura vive un período de sesiones ordinarias que se extiende desde el 1 de mayo al 30 de setiembre, período que puede prorrogarse por decisión de ambas Cámaras hasta el 30 de octubre. Ahora se está en el período extraordinario, que se desarrolla entre el 1 de noviembre y el 30 de abril.
En esta época los legisladores tienen prohibido presentar proyectos propios. De acuerdo al artículo 84 de la Constitución, durante las extraordinarias sólo pueden tratarse las leyes propuestas por el Poder Ejecutivo; además pueden tratarse los temas presentados por los legisladores antes del 1 de noviembre de cada año. Y conectado con esta razón, hay poco en análisis de la Legislatura que haya sido mandado desde Casa de Gobierno.
Pero la realidad es que el gran tema que acapara la atención son las elecciones y para muestra basta un botón: sobre el fin de las sesiones extraordinarias, los legisladores se preparan para el inicio de un nuevo año legislativo, hecho que sucede formalmente el 1 de mayo con la Asamblea Legislativa a la que asiste el gobernador a dar el discurso de apertura. Esta época suele ser tiempo de rosca política.
Es que todos los años para esta fecha, los legisladores ponen la atención en lo que se llama sesiones preparatorias, una de Diputados y una de Senadores. En esas sesiones quedan definidas las autoridades de ambas Cámaras y de las comisiones legislativas, por lo que estos días previos suelen ser de sordas negociaciones para mantener o cambiar el status quo vigente desde el 1 de mayo anterior.
Aún no está del todo definido, pero se estima que las preparatorias serán el 27 y 28 de abril próximo, pero nadie aún ha hablado de cargos.
Ahora la atención está puesta en el 19 de abril y probablemente el resultado de las elecciones incida en las autoridades de Cámaras.