Con el sello Azul

En la séptima temporada en la segunda categoría del fútbol argentino, el hincha de Independiente Rivadavia encontró un equipo con el que se identificó desde un principio. Garra y sacrificio fueron las claves para ello.

Con el sello Azul
Con el sello Azul

El jueves 25 de julio del año pasado, después del primer amistoso ante Juventud Unida Universitario de San Luis, en Más Deportes titulábamos: “La nueva Lepra: pico, pala y overol”. Se veía venir, se sabía que el equipo que estaba formando Roberto Trotta iba a ser un hueso difícil de roer, uno de esos equipos que ganarle, cuesta vida.

Las seis temporadas anteriores habían sido todo lo contrario. Pasaron figuras de primer nivel, porque el poder económico del Azul estaba sobrado y por eso al Bautista Gargantini llegaban los autos de alta gama, con sus figuras adentro. Pasaron muchos, algunos de ellos fueron los que dejaron esa temporada tan mala (45 puntos) que tuvo en jaque con el promedio a este equipo modelo 2013/14, hasta el sábado por la tarde.

Después de aquel partido ante el equipo puntano, Roberto Trotta declaraba que: “me gustó sobre todo la entrega que tuvo el equipo”.  El “Cabezón” sabía que ese equipo, plagado de productos genuinos de nuestra tierra sumado a la experiencia de Walter García, Josué Ayala y Ariel Agüero, podía lograr el objetivo de quedarse en la segunda categoría del fútbol argentino.

No fue fácil. Hubo que superar un bajón futbolístico y anímico que terminó con una goleada en contra ante el campeón de la categoría. Ahí estuvo el “click”. “Tocamos fondo”, frase que se escuchó y mucho en temporadas anteriores, pero no había reacción. Ahora sí. De los últimos 15 puntos en juego el Azul sumó 11 unidades que le sirvieron para que a una fecha de terminar la temporada, ya esté afuera de todo y lo que es destacable es que nunca dependió de nadie.

Muchos podrán, acertadamente, minimizar este logro con que sólo se salvó la categoría, pero para este grupo (jugadores, cuerpo técnico y dirigentes) es tan valioso como ganar un torneo porque con un bajo presupuesto, muchas ganas y sobre todo sacrificio se logró algo que hace once meses atrás, parecía imposible.

El premio máximo puede estar a la vuelta de la esquina. El nuevo torneo de ascenso es casi un hecho y por qué no, uno de los premios podría ser para este grupo.

Tenemos algo para ofrecerte

Con tu suscripción navegás sin límites, accedés a contenidos exclusivos y mucho más. ¡También podés sumar Los Andes Pass para ahorrar en cientos de comercios!

VER PROMOS DE SUSCRIPCIÓN

COMPARTIR NOTA