Con la media sanción que consiguió ayer en el Senado, la ley de extinción de dominio -para recuperar bienes de la corrupción- dio un paso fundamental que debería terminar con la aprobación final en Diputados en abril.
"Al menos hay que darle dos semanas de tratamiento. No creo que haya inconvenientes para que se sanciones", reconoció el presidente de la Cámara Baja, Nestor Parés.
En el mismo sentido se expresó el jefe de la bloque radical, César Biffi: "Es una ley importante que busca recuperar los bienes de los hechos de corrupción. Vamos a darle rapidez pero no vamos forzar la aprobación. Vamos a buscar acuerdo político".
El proyecto en Senadores cosechó 28 votos a favor y 5 en contra. Lo aprobaron el oficialismo, el PJ, el PI, MásFe y Protectora; mientras que por el rechazo votaron el kirchnerismo (Unidad Ciudadana) y el Frente de Izquierda.
Desde el Gobierno celebraron la media sanción. El subsecretario de Justicia, Marcelo D'Agostino, declaró que es un "salto institucional altísimo, ya que es una herramienta jurídica que se le otorga a los fiscales para que puedan ir detrás de los bienes que están en manos de la corrupción y aquí en Mendoza hay casos emblemáticos".
El propio gobernador, Alfredo Cornejo, insistió ayer en una rápida sanción definitiva y apuntó contra varios ex funcionarios del PJ: "Hay muchos hechos de corrupción que son flagrantes en Mendoza, como el ex intendente de Guaymallen, (Luis) Lobos, que se ha quedado con lotes y que deben ir a parar al Estado para un Fondo para Educación; o autos y camionetas de la Tupac (Amaru) que se están deteriorando en los galpones judiciales", disparó.
El proyecto que presentó Cornejo a fines de enero tuvo algunas modificaciones a partir de aportes de la oposición. Sumó una vía de defensa a los acusadas penalmente de manera que puedan probar el origen de los bienes cuestionados. Y también permitir la incautación de esos bienes no al final del proceso sino sino cuando se está imputado o sospechado.
En caso de que la persona haya sido declarada inocente, se devolverá el bien a la persona o su precio si el bien no pudiera reintegrarse. Esto se logrará a través del fondo creado con el producido de esos activos para poder hacer frente a estas eventuales consecuencias.