Sociedad
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hace 4 horas
La provincia funcionó hoy a media máquina por el paro nacional convocado por los gremios para reclamar la eliminación del Impuesto a las Ganancias. Por las calles circularon pocos micros, troles y formaciones del Mentrotranvía. La atención al público estuvo resentida en hospitales y organismos públicos. Los bancos y las estaciones de servicio no abrieron y escasos chicos asistieron a clases pese a que las escuelas dictaron clases con normalidad.
"En el Gran Mendoza el ausentismos docente fue de 20 por ciento y el ausentismo de alumnos alcanzó en algunos departamentos el 90 por ciento", dijo el jefe de gabinete de la Dirección General de Escuelas, Andrés Cazabán.
"En los departamentos más alejados del Centro el acatameinto fue muy bajo", agregó Cazabán.
La jornada, además, comenzó con cortes de calles céntricas por parte de diferentes sindicatos. Los principales piquetes se realizaron sobre avenida San Martín, a la altura de Colón y otro en Garibaldi. Ambos cortes estuvieron liderados por agrupaciones de izquierda (Partido Obrero, el Movimiento Socialista de los Trabajadores, Frente de Izquierda) y los gremios ATE, Ampros y Fadiunc (los docentes de la UNCuyo no dictaron clases).
Desde los gremios señalaron que el acatamiento al paro fue "alto y muy importante en todo el país”. En Mendoza, el paro se sintió más durante las primeras horas de la mañana. Es que entre otras cosas los colectivos partieron más tarde de lo habitual (comenzaron a circular a las 8.30 y terminarán a las 22.30) y las frecuencias fueron reducidas, lo que complicó el traslado de varios usuarios hacia sus trabajados.
Se registró poco movimiento en los hospitales, en la Terminal de Ómnibus, en el aeropuerto local.
"Hay un alto acatamiento, estamos todavía en un proceso de paritaria con un salario congelado desde mayo del año pasado y atravesando no sólo la problemática del Impuesto a las Ganancias sobre el salario, sino también el hecho de que hay compañeros que no pueden llegar a la canasta básica familiar, están en negro o lejísimo del 82% móvil", afirmó Raquel Blas, titular de ATE, esta mañana, mientras participaba de la concentración en San Martín y Colón.
La dirigente sindical indicó que “con cualquier aumento que se aplique este año en el sector Salud, casi el 70% de los trabajadores será alcanzado por Ganancias, mientras que en el área del Casino, ya el 80% del personal tributa este impuesto”. “Es un castigo para aquellos de mayor antigüedad y que más zona u horas de trabajo tienen en el Estado o en la parte privada”, agregó Blas.
En tanto el diputado Héctor Fresina del Partido Obrero sostuvo: "Una parte cada vez más grande de la clase obrera está sufriendo el robo del Impuesto al salario (Ganancias), que ya no está destinado a los empresarios sino a los trabajadores asalariados. El salario no es una ganancia, es lo que permite al trabajador sostener a su familia, por eso queremos que se elimine. Sobre el salario ya no pueden cobrarse más impuestos de los que ya paga el trabajador: IVA; los descuentos por ley en el sueldo. Es decir que un 40% del salario está destinado al pago de impuestos. Esto no puede seguir así".
Panorama en el Este provincial
El paro en la zona Este mostró una merma notable en el movimiento habitual de gente en las calles, que se redujo en un 60 por ciento aunque la mayoría de los negocios decidió abrir sus puertas. "A esta altura del mes se vende poco y hoy mucho menos, porque anda poca gente", opinó Osvaldo, empleado de una zapatería del centro de San Martín.
En el movimiento de los colectivos es donde más se notó el acatamiento al paro y recién a media mañana comenzaron a circular algunas unidades, ya que hasta ese momento había sido nula. “Estamos trabajando como en un día domingo, con un 20% de circulación de colectivos”, comentó a media mañana un encargado de la playa donde se guardan los colectivos de la empresa Nueva Generación, en calle Espejo, de Junín.
No hubo incidentes en la zona producto del paro y el dato fue confirmado por el comisario distrital Sergio Yanson: “Los colectivos que salen son muy pocos y entre los que circulan no hemos tenido reporte de ningún tipo de incidente”, explicó el comisario y agregó: “Tampoco hubo piquetes u otro tipo de disturbios en la región; sí tenemos un piquete pero en San Luis, sobre ruta 7 y a la atura de La Cumbre, donde están frenando a los camiones que vienen con carga hacia la provincia”.
Taxis y remises funcionaron casi con normalidad, aunque estuvieron supeditatos a la carga de combustible y así, muchas unidades terminaron de trabajar cerca del mediodía. De todos modos hubo algunas estaciones de servicio que funcionaron, por ejemplo en La Paz y San Martín.
Aunque las escuelas abrieron sus puertas, en promedio la asistencia a clases fue de un 50 por ciento, con porcentajes más altos de ausentismo en aquellos establecimientos rurales, donde buena parte de los alumnos llega en colectivos.
La circulación de vehículos particulares en la región se vio reducida en al menos un 60 por ciento respecto a una jornada normal de trabajo y donde más se notó fue en el microcentro de San Martín y Rivadavia, donde habitualmente el flujo de vehículos es constante.
Los sindicatos rechazan el Impuesto a las Ganancias que grava los salarios en escala progresiva, pero que alcanza a un universo cada vez mayor de trabajadores al permanecer invariables las escalas mínimas.
Según el ministro de Economía, Axel Kicillof, el gravamen no se modificará porque "afecta a la minoría que más gana", unos 850.000 trabajadores sobre una fuerza laboral de 11 millones de asalariados, según estimaciones oficiales.
El impuesto se aplica sobre los salarios desde 15.000 pesos (unos 1.700 dólares) en escalas progresivas que llegan al 35%.
