El ganador del último sorteo del Euromillón, con 73 millones de euros de premio, compró su billete en Fátima, el municipio portugués de donde eran los tres pastores a los cuales se les apareció la Virgen, según la tradición católica, explicó ayer la prensa local.
En la víspera del gran peregrinaje de Fátima, los habitantes lo interpretaron como “un nuevo milagro” de la Virgen, según los testimonios recogidos por el periódico Correio da Manha.
Los propietarios del café del pueblo de Aljustrel ignoraban si el feliz ganador residía en la región o si formaba parte de los miles de peregrinos que viajan cada año al santuario de Fátima, situado a 130 km al norte de Lisboa, precisó el diario.
Según la tradición católica, la Virgen se apareció a tres jóvenes pastores en seis ocasiones a lo largo del año 1917, la primera el 13 de mayo.
El Papa Francisco anunció el año pasado que deseaba viajar a Fátima en 2017 para participar en las conmemoraciones del centenario de las apariciones.
El Papa Juan Pablo II profesaba una devoción particular a Nuestra Señora de Fátima, convencido de que ella le salvó la vida en un intento de asesinato el 13 de mayo de 1981 en la Plaza San Pedro, de Roma.