Llegaron las temperaturas altas y el verano y con ello más de un mendocino salió a buscar precios y cotizaciones a las diferentes empresas proveedoras de piscinas de fibra de vidrio y hormigón. Sin embargo, durante la recorrida más de un interesado se llevó una sorpresa y decidió dar marcha atrás. Y es que según las compañías comercializadoras la demanda comparada con el año pasado cayó entre un 10% y 20% y en los mejores casos se mantuvo.
Y es que hoy colocar una pileta clásica de 6 x 3 metros puede oscilar entre los 100 y 110 mil pesos, mientras que el año pasado podría oscilar los 80 o 90 mil pesos. En todos los casos, los valores son llave en mano, con la colocación terminada. Sin embargo, a este precio, el cliente debe sumarle un camión de agua, que puede costar $ 800 pesos, más el contenedor para retirar la tierra del lugar y materiales de corralón. En todo ello el posible comprador debe pensar que puede llegar a gastarse alrededor de $ 2.000 o $ 3.500 pesos más. Además, a todos estos valores hay que sumarle el mantenimiento mensual que puede oscilar entre los $ 300 y $ 1.000 dependiendo los productos y periodicidad que se coloquen.
Demanda en baja
A pesar de que los meses más fuertes son octubre-noviembre, las empresas coincidieron en afirmar que en esta oportunidad la demanda se ha retrasado, dado por la inestabilidad económica y contexto inflacionario del país. Es así, que por ejemplo desde IPC y Piscinas San Juan mencionaron que muchos de los interesados decidieron esperar hasta diciembre y los turnos recién se están dando para enero.
En ese sentido, Emanuel de Voda Piscinas remarcó que recién a fines de noviembre y principios de diciembre se empezó a mover un poco más, “impulsado por las altas temperaturas que hemos tenido durante esas fechas. Sin embargo, no es tan movido como el año pasado, aunque tampoco había sido una buena temporada”. Es que según expresó el vendedor, en otras temporadas septiembre ya es un mes fuerte de consultas y ventas, “pero este 2017 ha sido muy diferente”, remarcó.
La mayoría coincide con una baja en las ventas que va del 10% y 20%.
Precios y ventas
La pileta de fibra de vidrio se ha convertido en los últimos años en una de las opciones más buscadas por aquellos que quieren instalar un espejo de agua en sus casas. En este sentido, las piletas de hormigón, excepto para las casas más grandes, han dejado de ser una alternativa, por una cuestión de precio, mantenimiento y tiempo de instalación.
A la hora de consultar y adquirir el producto, una familia con una casa mediana de barrio busca tamaños medianos, que oscilan entre los 6 x 3 o 6 x 2,5 o 7 x 3. Estas dimensiones son los más demandados.
Desde Voda Piscinas contaron que ellos cuentan con dos tipos de piscinas, de fibra de vidrio y de hormigón. Sin embargo, más del 90% de la demanda va detrás de la primera alternativa. Esto se debe, según explicó el vendedor, a la practicidad, facilidad y tiempo de ejecución. Es que comparó que por ejemplo una de hormigón puede demorar más de un mes, mientras que la otra alternativa en 15-20 días está terminada, “considerando que el modelo esté disponible y el clima acompañe”.
Con respecto al tamaño más pedido por sus clientes, el vendedor consideró que por lo general se trata de piscinas de entre 5 y 6 metros de largo y de 2,5 o 3 metros de anchos. Se trata de piletas domiciliarias, “ideales para una familia y que entra cómodamente, sin quitar demasiado espacio, en el patio de una casa”, explicó.
Es así, que por ejemplo una piscina de 6 x 3 metros terminada está a 110 mil pesos. Este valor incluye materiales, mano de obra, casco de la pileta, equipo de filtrado, vereda, todos los implementos posteriores para el uso, instalaciones eléctricas, bombas, etc.
Con estas mismas características, el año pasado tenía un costo de 80 mil pesos. Por lo tanto, en este caso el incremento fue cercano al 18%.
Una piscina de hormigón armado oscila los 160 mil pesos sin revestimiento
Para impulsar las ventas, explicó que durante los meses de invierno, hasta agosto, se dejó los mismo valores que el año pasado. No obstante ello la demanda “continuó planchada”. En cuanto a qué ítem fue el que presentó mayor incremento desde VODA acentuaron que fue la mano de obra, la cual tuvo un incremento del 30%.
Si se tiene en cuenta una piscina de hormigón armado, el valor de la misma oscila los 160 mil pesos sin revestimiento. En este caso, detallaron desde VODA que también cuenta con todos los implementos.
Desde IPC concordaron también con sus colegas en que la demanda ha caído. En este caso comentaron que las piscinas, dependiendo el formato, varía su valor. La línea económica de IPC está en 88 mil pesos con un tamaño de 6 x 2,70 metros. Mientras que la línea griega está en los 100 mil pesos. El año pasado la económica estaba en los 70 mil pesos y la otra en 85 mil pesos. Por lo tanto, se habla de un incremento que ronda entre el 17 % y 25 %. Al igual que las demás empresas, estos valores incluyen baldosas térmicas, traslado de la piscina, instalación de cañerías, etc.
No obstante, agregaron desde IPC que estos precios no incluyen el llenado de la pileta, materiales de corralón para el contrapiso, materiales de instalación, contenedores para llevarse la tierra, entre otras cosas.
Por otro lado y continuando con las declaraciones de las demás compañías, Mauricio Perruzzi de Piscinas San Juan contó que este año ha sido similar al anterior, aunque la demanda en algunos meses ha tendido a la baja. “El contexto del país, inflación e incertidumbre ha hecho que mucha gente salga a averiguar y no termine decidiendo por miedo a lo que pueda pasar. Por lo tanto, la demanda tendió a la baja”, aclaró el franquiciador de la marca instalada en San Rafael.
En cuanto a los valores, indicó que la más demandada es la de 6 x 3 con 5 metros de profundidad. En este caso, el valor terminado es de 110 mil pesos y el año pasado oscilaba los 93 mil pesos -18%-.
Una empresa que ofrece alternativa de hormigón es Pirena Piscinas. Pero además, lo novedoso de esta empresa es que ofrece piscinas de arena, que es algo así como tener la playa y el mar en tu casa. En este caso, la compañía ofrece alternativas de diseño para que la piscina sea acorde al terreno, con curvas, cala con rocas, recreación de ríos y cascadas. En este caso, desde Pirenas contaron que una de tamaño medio, sin diseño, puede oscilar los $ 8.000 pesos el metro. Considerando una de tamaño estándar como las que evaluaron, como es el caso de 6 x 3, se habla de un valor de $ 144 mil pesos. Este caso, no incluye bombas y material de mantenimiento. Por lo tanto, “hay que sumarle eso, más el diseño, el cual puede ser provisto por la empresa o por un arquitecto del usuario interesado”, remarcaron. En este caso, el tiempo de ejecución es mayor y puede llegar a demorar aproximadamente 2 meses en construirse.
En cuanto a los incrementos, dijo que en comparación con el año pasado la suba ha sido del 40% dado principalmente por los aumentos del hierro y el cemento, así como otros materiales que son importador y dependen del comportamiento que tenga el dólar con respecto al peso argentino.