El costo de llenar un changuito de supermercado con una canasta de 34 productos de primera necesidad creció 407 por ciento entre diciembre de 2007 y la actualidad, según revelan datos de Consumidores Libres.
Según el relevamiento que hace la entidad en seis supermercados de la Capital Federal desde hace 19 años, a fines del 2007 una compra promedio era de 315,68 pesos, y los mismos productos este mes cuestan 1.600,32 pesos.
La canasta incluye varios cortes de carne, pan, frutas, verduras, fideos, productos enlatados y de limpieza y su relevamiento se hace en seis bocas distribuidas en La Boca, Caballito, Liniers y Pompeya.
En el rubro de carnes, el kilo de asado que en diciembre de 2007 se pagaba a 9,93 pesos hoy se abona a 61,66, mientras que bola de lomo, que se usa para las milanesas, pasó de 12,59 a 75,85 pesos.
La leche fluida muestra uno de las subas mas fuertes de todo el grupo, al pasar de 2,6 a 15,33 pesos durante el período, con un incremento del 489 por ciento, por encima del promedio de la canasta.
Aun si se hiciera una comparación con Precios Cuidados, el incremento del valor del producto La Serenísima, que se publica a 8,15 en los supermercados Coto de la Capital Federal, sería de 213 por ciento para el período. En el segmento de los lácteos, el queso fresco por salut que en 2007 costaba 23 pesos el kilo, en noviembre de este año costaba 111 pesos, con un incremento de 382,6 por ciento.
El titular de Consumidores Libres, Héctor Polino, señaló que “durante 2006 y 2007 los salarios todavía le ganaban a la inflación, pero luego se revirtió sobre todo desde el último año”.
Polino recordó que el ex secretario de Comercio Guillermo Moreno “intervino el Indec porque comenzó a difundir los aumentos de precios”, y señaló además que multó a consultoras y a su propia entidad defensora de los consumidores.
El pan, otro producto de alta sensibilidad, pasó de costar 2,69 pesos en ese momento a 18 pesos en la actualidad, mientras que el arroz pasó de 4 a 13,16 pesos. El aceite, por un litro y medio, pasó de valer 6 pesos a costar 14 pesos, mientras que el café varió de 4,5 pesos a 17,5 pesos el paquete de 250 gramos.
Si se toma la canasta que mide desde hace 19 años esa entidad de defensa de los consumidores, en diciembre de 2007, un salario mínimo vital y móvil era de 980 pesos y la canasta equivalía al 32 por ciento.
Casi siete años después el salario mínimo es de 4.400 pesos, y la canasta representa el 36 por ciento de esa cifra, lo que implica una pérdida del poder de compra de 4 puntos.