A fuerza de campañas, algunos controles médicos para prevenir ciertas patologías han logrado instalarse en gran parte de la población como ocurre con los ginecológicos en las mujeres y los de próstata en los hombres.
Sin embargo, otros muy necesarios no se realizan como es el caso de aquellos que apuntan a detectar algún riesgo para desarrollar cáncer de colon y recto o al menos llegar al tratamiento de manera temprana.
Esta es la principal causa por la cual esta enfermedad se ha posicionado como la segunda en cuanto a su incidencia y causa de mortalidad de origen oncológico en la Argentina y en Mendoza. Es precedido por el cáncer de mama y el de próstata.
La falta de información sobre el tema y los prejuicios respecto de los exámenes invasivos que pueda requerir la pesquisa llevan a que muchos prefieran evitarlo.
"Al paciente le da más temor la invasión por el ano que lo que le van a encontrar", asegura Sergio Salomón, jefe del programa de Prevención y Detección Temprana del Cáncer Colorrectal de la provincia. El peso de factores culturales le ganan a la preocupación por el cuidado de la salud.
Un dato a considerar es que si se llega a tiempo existe la posibilidad de apelar a un método no invasivo: el test de sangre oculta en materia fecal se realiza en el domicilio con una tira reactiva que luego debe ser llevada para su análisis. En la consulta el médico considerará la situación particular de cada persona e indicará este método o la videocolonoscopía que se realiza bajo anestesia.
Por otra parte, en aquellos casos tratados a tiempo las posibilidades de cura llegan al 90%. A esto se suma que una lesión precursora es el pólipo adenomatoso, de lenta evolución lo que da tiempo suficiente para anticiparse al desarrollo tumoral. Pero ni siquiera estos dos factores a favor del paciente han logrado destronarlo del podio.
En este contexto, el programa trabaja para para instalar el tema y ofrece diferentes lugares donde se puede consultar de manera gratuita para anticipar el diagnóstico. Se trata de acciones permanentes pero que se verán fortalecidas esta semana con una campaña (ver aparte)
No distingue género
El cáncer es el proceso de crecimiento y diseminación incontrolado de las células que en este caso pueden afectar tejidos del colon y al recto que conforman el aparato digestivo. La función del colon es extraer agua y nutrientes de los alimentos y convertir el resto en desechos (materia fecal) que luego pasan al recto para su posterior eliminación.
Según datos estadísticos esta alteración afecta prácticamente por igual a hombres y mujeres, aunque con mayor incidencia y peor evolución entre los varones.
Salomón le puso números a este dato. Explicó que las tasas de incidencia y mortalidad se evalúan por quinquenios y que la ultima evaluada abarcó de 2007 a 2011.
En la provincia si se consideran los tipos de cáncer en mujeres es la segunda causa de muerte después del de mamas pero en hombres es la tercera, el primero es el cáncer de pulmón y el segundo el de próstata que tiene un indicador muy similar al colorrectal.
En hombres la incidencia es de 20 cada 100 mil habitantes y la mortalidad de 14 en la misma cantidad. En tanto en el segmento femenino, la tasa de incidencia es de 14 x 100 mil y la de mortalidad de 10 cada 100 mil.
"Se desconoce por qué es mayor la incidencia en hombres que en mujeres -indicó el profesional- pero en esto puede influir que el hombre es más reticente a hacerse estudios; las mujeres tienen más arraigado el hábito y por ende tiene mayor cantidad de información".
Según el Registro Provincial de Tumores, entre 2006 y 2010 se registraron en la provincia 1.024 casos de este tipo de cáncer en mujeres y 1.187 en hombres.
Desde los 50 años
A partir de esta edad se recomienda realizar controles en ambos géneros aunque no existan síntomas.
En la consulta se consideran la edad, antecedentes familiares y personales (pólipos de colon, cáncer a edad temprana, enfermedades inflamatorias, colitis ulcerosas, entre otras patologías predisponentes), tal cual detalló el gastroenterólogo Federico Yáñez, del servicio del Hospital Central. "Esa es la prevención secundaria, la primaria es evitar los factores de riesgo.
La idea es que la persona consulte antes de tener síntomas", destacó. Estos pueden ser dolor, pérdida de peso, sangrado, cambio en la forma habitual de ir de cuerpo en cuanto a la consistencia o el ritmo.
Además aclaró que quienes tienen antecedentes familiares deben estar más atentos: "Si un familiar en primer grado tuvo (un tumor) a una determinada edad, los hijos deben consultar diez años antes".
Un dato no menor es que en torno al 75% de los casos de este tipo de tumores no obedecen a cuestiones genéticas sino dietéticas y ambientales. Por ello es fundamental evitar ciertas prácticas que puedan transformarse en un factor de riesgo como el tabaquismo, consumo de grasas y carnes rojas en exceso, el consumo problemático de alcohol y el sedentarismo.
El tratamiento del cáncer se basa en estrategias de control local -como la cirugía y la radioterapia- y estrategias de control sistémico -como la quimioterapia, hormonoterapia y terapias biológicas.
Controles gratuitos
Con la intención de generar conciencia y aumentar los controles el Hospital Central realizará hasta el viernes inclusive una campaña de prevención que es parte de las acciones que viene realizando el programa provincial. Los interesados pueden acercarse sin turno a los consultorios externos del nosocomio (Catamarca y Salta) de 9 a 12.
Está dirigida al público en general con hincapié en hombres y mujeres mayores de 50 años. Asimismo quienes tengan antecedentes familiares deben controlarse aunque sean más jóvenes.
Por otra parte, desde el programa de Prevención y Detección Temprana del Cáncer Colorrectal se informó que durante todo el año puede consultarse en los centros de salud de cabecera de cada departamento y en los servicios de gastroenterología de los hospitales Lagomaggiore y Central.