Zoom, la aplicación que ofrece un servicio de conferencia remota que combina videoconferencia, reuniones en línea, chat y colaboración móvil, creció de manera exponencial en las últimas semanas a raíz de la cuarentena que rige en muchos países del mundo contra el Covid-19.
En lo que va de año, la capitalización de Zoom ha aumentado en más de dos veces, hasta los 43.600 millones de dólares, el doble del valor de Twitter. Ante la demanda, la empresa se vio obligada a aumentar la capacidad del servicio. Con millones de personas trabajando desde sus casas en condiciones de aislamiento, Zoom se ha vuelto en la propuesta más elegida para mantener el contacto con colegas, familiares, amigos y allegados.
La app, disponible en las tiendas digitales de Apple y Google, tiene 12,92 millones de usuarios activos mensuales, un aumento del 21% desde fines de 2019.
“La creciente epidemia ha ampliado mi visión sobre lo que significa ser un proveedor de tecnología de comunicaciones de video en tiempos de necesidad. Sé que muchas organizaciones están lidiando con la forma de mantener la continuidad del negocio y mantener a los empleados comprometidos en medio de la amenaza del virus, y me veo obligado a ayudar a cualquiera que lo necesite”, resaltó en su blog Eric Yuan, el fundador de Zoom.
Algunos usuarios se inclinan por la opción gratuita, que limita la charla a 40 minutos y no permite grabar, aunque la empresa levantó ese límite en China, en el peor momento de la pandemia para facilitar reuniones y charlas familiares. También están las versiones “pro”, de entre 15 y 20 dólares por mes, destinadas para empresas grandes y con servicios como almacenamiento ilimitado de grabaciones en la nube.
¿Cómo funciona?
Si querés dejar Skype de Microsoft, Zoom también está disponible para Windows y MacOS. En el plan básico gratuito pueden alojarse hasta 100 participantes, luego comienzan distintos planes según lo que necesite el emprendimiento o empresa.
Hasta 1.000 usuarios pueden participar en una sola llamada de video Zoom, y 49 videos pueden aparecer en la pantalla a la vez.
Zoom tiene capacidades de audio y video HD, herramientas de colaboración como compartir pantalla simultáneamente y coanotación, y la capacidad de grabar reuniones y generar transcripciones. Gmail, por ejemplo, admite la programación y el inicio de reuniones. Simplemente hacé clic en el icono del calendario, luego en la hora de la reunión y en el enlace debajo de “Unirse a la reunión de Zoom”. Si el anfitrión lo programó, también puede haber opciones de llamada.
Como si se tratara de Slack o servicios más conocidos como WhatsApp o Telegram, también podés optar por el chat. No es obligatorio contar con cámara o micrófono. El registro (el inicial, por supuesto) es de carácter gratuito. Con el correo, la cuenta de Google o Facebook es suficiente.
En el celular
1. Creá tu cuenta e ingresá al servicio. Tocá en “Nueva reunión” o “Entrar a una reunión”, en caso caso que hayas recibido un ID de reunión al cual unirte.
2. Iniciada la sesión, podés sumar a más gente en el apartado “Participantes”. También podés enviar archivos, imágenes, audios o desactivar la cámara.
3. Si querés sumar usuarios que no están en la lista de contactos de Zoom, andá a “Participantes”, “Invitar”, “Copiar la dirección del sitio web” y compartí el enlace a las personas.
4. Con “Finalizar” cerrás la charla.
En la computadora, el procedimiento es igual, salvo que antes tenés que descargar e instalar el "Cliente Zoom para reuniones" que la compañía ofrece en su página web.