Los accidentes domésticos ocurren y es imposible anular el margen de riesgo de sufrirlos, por más precauciones que tomemos. Por eso, sabiendo que todos estamos expuestos a padecer una situación de este tipo, debemos conocer cuáles son los protocolos de acción para tomar las medidas adecuadas, actuando en forma tranquila y segura.
Heridas cortantes
Las heridas cortantes son probablemente el tipo de accidente doméstico más frecuente. Cuando se produce un accidente de este tipo es imprescindible saber cómo actuar, ya que no requiere los mismos cuidados que un simple golpe.
En primera instancia se debe identificar la herida y llevar al accidentado a un lugar seguro, donde se le pueda aplicar agua a la zona afectada. Lavando la herida con agua fría se alivia el dolor y se logra observar la profundidad del corte. También se recomienda lavar la herida con agua oxigenada, permitiendo que la espuma limpie el área afectada. Se debe confirmar que no hayan objetos cortantes, como pueden ser vidrios rotos. En caso de encontrarlos lo correcto es no retirarlos y solicitar ayuda profesional.
