¿Te acordás que Pamela Anderson le dijo a los medios que su perro, suicidándose, le había indicado que su ex esposo no era el hombre ideal para ella? Bueno, pues, ahora es Mickey Rourke el que aportó otra cualidad terapeútica de su perrito. El actor contó que cuando, hace ya muchos años, él estaba en un momento vital complicadísimo el perro fue el que lo hizo recapacitar.
El protagonista de “El luchador” contó en el documental “Eating happiness” que cuando estaba hundido en la miseria económica y su esposa lo había dejado, él decidió matarse. “Cuando estaba buscando en qué sitio de mi cabeza colocar el cañón (del revólver), apareció mi perro Beau Jack y gimió.
Entonces le miré a los ojos, él me miró y entendí que me estaba diciendo: ‘¿Quién cuidará de mí?’ Y entonces me di cuenta de que no merecía la pena morir”, detalló Rourke, de 63 años. En 2000, el perro murió de un ataque al corazón. Rourke dijo que intentó salvarlo haciéndole respiración “boca a boca durante 45 minutos”. ¡Qué momento!