Con la requisitoria de elevación a juicio contra el ex comodoro Luis Fernando Estrella y el ex general Luciano Benjamín Mendéndez, dio inicio hoy el juicio para determinar los responsables del asesinato del obispo de La Rioja, monseñor Enrique Angelelli, ocurrido el 4 de agosto de 1976 durante la última dictadura militar.
La causa, que se enmarca en los juicios por delitos de lesa humanidad cometidos en La Rioja, involucra a Estrella, Menéndez y otros acusados por "homicidio agravado, en concurso de dos o más personas y Asociación Ilícita", causa en la que son querellantes, entre otros, la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación.
Los hechos que se investigan ocurrieron el 4 de agosto de 1976, cuando el entonces obispo de La Rioja regresaba desde la ciudad de Chamical a la capital, tras participar de una misa en memoria de los sacerdotes asesinados que pertenecían a su diócesis, los padres Carlos Murias y Gabriel Longueville.
Angelelli viajaba en una camioneta Fiat 125 Multicarga junto al exsacerdote y amigo personal, Arturo Pinto, cuando, según testigos y el mismo Pinto, un automóvil de color blanco se cruzó por delante de la camioneta provocando su vuelco.
Producto de los tumbos dados por el vehículo, Angelelli salió despedido y murió en el acto, en tanto que Pinto quedó dentro de la camioneta con diversas heridas.
Posteriormente se dijo que el cuerpo del exobispo presentaba un fuerte golpe y un agujero similar al de una bala en la parte trasera de su cabeza, por lo cual se determinó que se trató de un homicidio.
El tribunal quedó integrado por José Camilo Quiroga Uriburu como presidente y los jueces de Cámara subrogantes Carlos Julio Lascano -del Tribunal Federal 1 de Córdoba- y Juan Carlos Reynaga -del Tribunal Federal de Catamarca-, en tanto que se designó como juez Sustituto a Mario Garzón del Juzgado Federal de Primera Instancia de la ciudad de San Francisco, Córdoba.
En la causa se encuentran imputados el exgeneral Menéndez y el excomodoro Luis Estrella, junto con otros tres acusados: Jorge Albano Harguindeuy, Jorge Rafael Videla y Juan Carlos Romero, quienes ya fallecieron.
Las partes están conformadas por los fiscales generales Michel Horacio Salman y Darío Illanes; los querellantes Miguel Angel Morales -por la Organización Tiempo Latinoamericano- y María Elena Coseano, sobrina del exobispo; además de Pedro Goyochea y Mirta Sánchez, por el Obispado de La Rioja, y Guillermo Diaz Martínez y Bernardo Lobo Bugeau por la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación y de la Provincia.
También actúan los abogados defensores oficiales Carlos Cáceres y Juan Miguel Deleonardi, representando a Menéndez y Estrella respectivamente.
En la primera audiencia, la que comenzó pasado el mediodía debido a problemas de conexión de la empresa Telecom en gran parte del norte del país, solamente se leyó la requisitoria de elevación a juicio de la Fiscalía en contra de Estrella y también la de Menéndez, aunque éste se tuvo que retirar de la Cámara Federal de Córdoba debido a problemas de salud.
La fiscalía expuso en su extensa requisitoria que las persecuciones de los curas riojanos "fueron puestas en conocimiento de la jerarquía regional y nacional, la que fue publicada en los medios de prensa".
Tras dar cuenta de las reuniones del episcopado con el entonces presidente de facto Jorge Rafael Videla, indicaron que "en esta causa queda particularmente demostrado que el terrorismo de Estado 1976/1983 actuó criminalmente bajo el amparo de la jerarquía de la Iglesia Católica en Argentina".
Tras la lectura de las acusaciones, el tribunal dispuso un cuarto intermedio hasta el lunes 11 para culminar la lectura de la requisitoria de elevación a juicio de la Fiscalía en contra de Luciano Benjamín Menéndez e iniciar los debates.