Dos años y medio después de ocurrido el hecho, comenzó este lunes el juicio contra Andrés Salvador Di Césare (26), quien deberá responder por el asesinato de Julieta González (21), el único femicidio sin condena de los tres registrados en la violenta primavera de 2016.
El debate arrancó cerca de las 8.30 este lunes y se extenderá durante toda la semana en el tercer piso de Tribunales. Mauricio Juan será el juez que presida el juicio. En tanto que la instructora del caso, la fiscal de Homicidios Claudia Ríos Ortíz, será quien acuse y el abogado Fernando Luquez defenderá al imputado, quien es hijo de un empresario dedicado al transporte.
Como el caso se elevó a juicio con posterioridad a la implementación de los juicios por jurado, la modalidad del debate será la habitual de los tribunales penales colegiados.
Las demoras en la tramitación del expediente -por las diferencias de las partes en relación a las pruebas- ha tenido como consecuencia que sea el único de los tres femicidios ocurridos en septiembre de 2016 que aún no se define.
Es que por la muerte de Janet Zapata (29) fue condenado a perpetua, en setiembre de 2018, su pareja Damián Minati y Juan Manzano a 10 años como partícipe secundario.
En tanto que por el femicidio de Ayelén Arroyo (19), Roque Arroyo (54) fue condenado en abril de 2018 a prisión perpetua por asesinar a su hija.
Las dos posiciones
Según la acusación, Andrés Di Césare habría asesinado a Julieta y luego habría abandonado el cuerpo, que fue encontrado seis días después -el 27 de septiembre- atado de pies y manos en una ripiera cercana al penal Almafuerte en Cacheuta, Luján.
Julieta estuvo cautiva en alguna parte hasta que la mataron a golpes; el mortal le fue propinado en la cabeza con un objeto no identificado.
La madre de la joven, una policía que trabaja en la comisaría Décima, llamó durante la tarde y noche del 21 al celular de su hija y no atendió. En cambio, el 22 le respondieron, aunque escuchó una voz femenina que decía “cortá”.
Inicialmente el expediente incluyó una declaración espontánea que el detenido hizo a la Policía pero luego la Justicia determinó que fue realizada bajo coacciones.
En enero de este año, Di Césare declaró por primera vez y dijo que el 21 de septiembre de 2016 estuvo con Julieta, con quien mantenía una relación, y que protagonizaron una discusión que terminó violentamente: ella le produjo algunos rasguños y él le propinó algunos golpes, uno en la nariz que le produjo sangrado.
Después de esa pelea, que se desarrolló dentro del auto de Di Césare, el joven la dejó a pocas cuadras de su casa. La versión, claro, es distinta a la de la acusación.