Sin dudas que cada vez que se juega una final, la gente responde. Y ayer no fue la excepción. Es que más de seis mil personas se acercaron a la cancha de Los Tordos para presenciar un nuevo desenlace del torneo Top 8 Cuyano.
Ya en las semifinales tanto desde la Unión de Rugby de Cuyo con el apoyo de los clubes se pidió que no se utilizara pirotecnia y así sucedió. Sólo humo del color de cada equipo se pudo ver en la entrada de los equipos.
Peuma se quedó con el tercer puesto
La jornada ovalada comenzó con la disputa del tercer puesto entre Los Tordos y Peumayén. El triunfo quedó en manos del equipo del Bajo de Luján de Cuyo por 27 a 26.
Bochornoso final en el partido de reválida
Cuando finalizó el partido correspondiente a la reválida entre el Mendoza RC y San Juan RC, el juez de touch Gustavo Ianchina tuvo un entre dicho con allegados al equipo sanjuanino por el último try de los mendocinos, y todo terminó en golpes de puño, de ambos lados. Pero, sin dudas, el que peor se la llevó fue Ianchina que recibió golpes de distintas personas. Sin dudas,de un lado y de otro, un verdadero bochorno.
¿Para algunos fue el último?
El juez principal del encuentro de ayer, Claudio Antonio y uno de sus ayudantes, Osvaldo Cuello -que también dirigió el sábado la final de Intermedia- dejaron entrever que los partidos de este fin de semana podrían haber sido los últimos de sus carreras.
Fernández y Báez, siempre presentes
Jorge Fernández y Rodrigo Báez son los dos jugadores que han sido titulares en los últimos cuatro títulos que ha logrado Liceo. Pablo Pipistrelli, que ayer terminó jugando, fue titular en las tres anteriores. Pero también han sido parte de los últimos logros Juan Pablo Micheli, Facundo Barni, Gustavo Gil, Juan Cruz Linares, Santiago Zabaleta y Patricio Orduña, que arrancó esta temporada pero hace unos meses se fue a jugar a España.
Además Leonardo Leyes, que consiguió 3 títulos como jugador, lleva dos en staff técnico, 2010 y 2016.
Manda en las últimas definiciones
Los Clavos ampliaron su diferencia en el historial de finales frente a Marista, al menos en lo que se refiere a las últimas definiciones.
Es que Liceo, que llegaba a su sexto encuentro decisivo desde la temporada 2009, se hizo gigante en cancha de Los Tordos y volvió a celebrar frente a Los Curas, como lo había hecho en 2009 (28-14 en Mendoza RC), 2010 (11-8 en Independiente Rivadavia) y 2012 (34-27 en cancha de la Lepra).
Mientras que en 2011 Marista parecía ponerle freno a su rival cuando lo derrotó también en el Bautista Gargantini, por un ajustado 22-21. Y la historia los volvió a cruzar ayer, con el condimento especial, si se quiere, de que uno de los dos defendían el título logrado durante 2015: Marista, equipo que ayer afrontaba su séptima definición de los últimos ocho años.
Pero en esa oportunidad la corona cambió de dueño. Fue Liceo el que hizo mejor las cosas ante un marco de público acorde para una final y se quedó con la celebración para sumar su séptima estrella en el rugby provincial.