Con algunos de los pases de baile que conquistaron corazones en Brasil, la selección de Colombia festejó ayer en un recibimiento triunfal luego de disputar la mejor Copa del Mundo en su historia.
Más de 100 mil personas se congregaron en el Parque Simón Bolívar de Bogotá para vitorear al astro James Rodríguez, el técnico José Pekerman y el resto de la selección que por primera vez alcanzó los cuartos de final de un Mundial. Colombia fue eliminada al caer 2-1 ante Brasil.
Después de un recibimiento con alfombra roja en el aeropuerto internacional Eldorado, y una caravana por avenidas pintadas de amarillo, azul y rojo por miles de personas vestidas con las camisetas de la selección, la fiesta se armó al llegar al parque en el noroccidente de la capital.
Encabezados por Pablo Armero, los jugadores bailaron los pasos que popularizaron en los festejos de sus goles en Brasil. Pekerman, argentino de nacimiento pero con fuertes lazos en Colombia, se les unió en la coreografía.
“¡Colombiano, Pekerman es colombiano!”, coreó la multitud. “Muchas gracias a todo el pueblo colombiano porque siempre lo sentimos cerca, nos dio mucha fuerza en todo momento. Colombia dio un paso gigante.
Tenemos muchas ganas, estamos a la altura de los mejores. ¡Viva Colombia!”, respondió el DT, que en su etapa como futbolista jugó allí, donde nació una de sus hijas.
James, estrella del plantel y máximo goleador del Mundial con seis tantos, agradeció a la concurrencia “a nombre de todo el grupo”.
La llegada del plantel provocó una congestión en el terminal aéreo y hubo reporte de vuelos retrasados.
“¡Bienvenida nuestra selección! Muchas gracias por tantas alegrías y por enseñarnos a soñar”, escribió el presidente Juan Manuel Santos en su cuenta de Twitter. Después, el mandatario almorzó con los integrantes del equipo en la sede de la Federación Colombiana de Fútbol.
Los futbolistas hicieron el recorrido en un autobús descubierto, mientras eran aclamados por multitudes con camisetas de la selección y agitando banderas de Colombia.
El campeón del Giro de Italia, el colombiano Nairo Quintana, tras subir una fotografía en su cuenta de Twitter con los miles de colombianos que se unieron al recibimiento, escribió: “Un alto en el entrenamiento para emocionarme como nunca, esto lo logra el deporte y merece más apoyo”.
La selección de Pekerman unió a los colombianos durante tres semanas, en las que el país se paralizó durante cada partido.
El estratega argentino tomará unas vacaciones mientras su representante Pascual Lezcano negociar con la federación las bases de una prolongación del compromiso que arrancó a principios de 2012.
William Suárez, un administrador de empresas de 38 años, dijo que los jugadores de la selección y su técnico “son los personajes más importantes que tiene en este momento nuestro país. Ellos son la mejor expresión y representación que Colombia ha tenido en mucho tiempo”.
“Quedamos con un sinsabor muy grande, pero en el fondo del corazón los 47 millones de colombianos sabemos que tenemos selección para ser campeones del mundo”, añadió Suárez.
La fiesta de arribo se extendió a todo el país. Las alcaldías de las ciudades y pueblos donde nacieron los jugadores alistaban grandes recibimientos.
Colombia jugó cinco partidos en Brasil y ganó cuatro: ante Grecia (3-0), Costa de Marfil (2-1) y Japón (4-1) en primera ronda, y contra Uruguay (2-0) en octavos de final.
Fue la mejor actuación de Colombia en los cinco mundiales en los que ha participado. Antes de Brasil, Colombia sólo había alcanzado unos octavos de final en el Mundial Italia 1990.
La campaña mundialista tuvo un condimento adicional: Costa Rica, con el colombiano Jorge Luis Pinto como timonel, también avanzó hasta los cuartos de final por primera vez en su historia.