La Coca Cola amenazó con frenar las inversiones anunciadas en 2016 por U$S 1.000 millones en Argentina a causa del aumento del impuesto interno estipulado por la reforma tributaria.
Sin embargo, la advertencia fue tomada sin mayor preocupación en la Casa Rosada: "Están haciendo un lobby feroz, pero el país necesita los recursos", contestó un funcionario a este diario.
En la multinacional pusieron el grito en el cielo el jueves cuando el Presidente confirmó que había eliminado los nuevos impuestos contra el vino, los espumantes y las cervezas, que estaban en el proyecto de ley que irá el lunes al Congreso.
La reacción se extendió a todo el sector. La Cámara Argentina de la Industria de Bebidas Sin Alcohol (Cadibsa) emitió un comunicado en el que denuncia "discriminación" del Gobierno y alerta por la posibilidad de que se eliminen 5.000 empleos en 2018.
La industria de bebidas sin alcohol genera en Argentina más de 26.000 empleos directos y representa el 0,5% del PBI del país. Sus ventas superan los $ 100.000 millones al año y su actividad productiva se concentra en Buenos Aires, CABA, Córdoba, Santa Fe, Entre Ríos, Corrientes, Jujuy, Salta, Tucumán, Mendoza, Neuquén y Río Negro.
Estas provincias representan el 95% del empleo registrado en los sectores alimentos y bebidas azucaradas y un 100% en producción de azúcar.