Si algo dejó en claro el plenario provincial de ayer, además de lo lejos que están de llegar a un acuerdo docentes y Gobierno, es la feroz interna que se está librando hacia el interior del SUTE de cara a las elecciones de autoridades que tendrán lugar este año.
De acuerdo a la lista a que pertenecen, los oradores se extendieron en críticas o halagos a la actual conducción. Tanto fue así que el plenario debió votar para que los discursos se circunscribieran sólo a las mociones que traían de sus escuelas.
Insultos, gritos, ironías fueron de la partida. Así la discusión salarial, se mezcló con el debate de "mezclarse" con la lucha de ATE, de elegir en plenario a los delegados o la necesidad de reescribir el estatuto del SUTE. La oposición destacó que el actual "no fue discutido en las escuelas", "tiene muchas irregularidades" y "debería debatirse en un congreso".
Los delegados que pertenecen a las listas Lila y Marrón no ahorraron en críticas a lo que consideran "tibieza" del actual secretario gremial. "Un apellido tan ilustre en alguien que muestra una actitud tan pusilánime", lanzó uno de los oradores en alusión al Che, ante los silbidos de la mitad de los docentes. Guevara prefirió no detenerse en esta pelea que desvía la mirada de la salarial.
La presencia de los escribanos públicos en los plenarios fue otro de los puntos cuestionados por la oposición. "La intención no fue coaccionar a nadie ni ninguna maniobra oscura, sólo se buscó dar fe de los resultados votados en cada plenario", explicó Guevara.