La ministra de Salud radical quiere ser diputada nacional con la impronta del gobernador Alfredo Cornejo, gestión que defiende a rajatabla. Y si bien no pertenece al mismo sector interno del mandatario, considera superadas esas instancias, como también las que implican luchas de género.
-Era del sector interno de Sanz, ¿en cuál está ahora?
-Ahora soy del Equipo de Gobierno de Alfredo Cornejo y estoy orgullosa de serlo. Cuando recuperamos la provincia Ernesto Sanz nos reunió y nos dijo que desde ese momento pertenecíamos “a un solo sector, el del Gobierno”.
-Alineó Sanz, no Cornejo..
-Cornejo tiene un liderazgo absoluto, por eso es exitosa la gestión. Yo me siento parte de un gobierno transformador y un proyecto colectivo. Siempre viví así la política.
Desde que empecé con Fayad en Capital, en 1983. Cuando Ernesto empezó a relanzar el partido, en 2007, vi en él un fuerte liderazgo. Él me propuso en las legislativas desde su espacio, como senadora.
-Presidió la comisión de Género, ¿está bien que un líder decida su candidatura?
-La lucha de género es por la igualdad. Y en estas listas conseguimos paridad de género. Yo encabezo la lista como diputada nacional.
-Pero decidió Cornejo.
-Fue consensuado en el frente. Y al conformar las listas se tuvo en cuenta a los intendentes, en temas de paridad de género, en juventud, para que estuvieran en lugares entrables. Antes se daba participación pero en los últimos lugares.
-¿Cuáles son sus méritos?
-Soy militante de toda la vida. Creo en la democracia para cambiar la realidad de la gente. Y tanto en política como en lo profesional me dedico con pasión. No son méritos individuales, es un desafío colectivo.
-Piden votarla a usted.
-Todos nos complementamos en un proyecto colectivo. Por eso creo que nos está yendo bien. La gente nos pidió algo distinto, quería el fin del autoritarismo, del ‘vamos por todo’, la corrupción, el narcotráfico. Dirigentes como Ernesto, vieron eso. Él lo planteó en la convención de la UCR de Gualeguaychú (marzo de 2015).
-¿Le ha sido útil a los dirigentes? Por ejemplo al quedar al frente del bloque...
-A lo mejor se buscaba consenso, me caracterizo por eso. El gobernador pedía que las propuestas salieran con consenso a pesar de tener mayoría. Los proyectos se discutían y muchos salían con modificaciones hechas por el PJ.
-¿Y en el Ministerio?
-Además de política soy especialista en Salud Pública. En la campaña estuve en el equipo técnico de Salud, le tocó a otro ser el ministro. En la UCR siempre planteé el tema.
En el Senado integré la comisión de Salud. Cuando salió Giachi (ex ministro, denunciado por violencia de género), me llamaron por tener conocimiento en Salud Pública, eso es lo valorable.
-¿Por qué lidera la lista?
-Se plebiscita la gestión y soy ministra. Creemos estar haciendo una tarea ordenada, austera, transformadora.
-¿En qué ayudó a la Salud como ministra?
-Hay mucho para mostrar, como la baja de mortalidad infantil, del embarazo adolescente; el proyecto de llevar los centros de salud a la gente. La idea es que los profesionales se radiquen en centros de salud y zonas alejadas.
-En los centros de salud faltan médicos...
-Se necesitan más incentivos, el camino es largo y el tema es nacional, por eso debe ir al Congreso. También trabajamos en prevención. Tendremos porcentajes históricos de vacunación antigripal, porque empezamos antes. Los logros hacen que se vea la inversión, a pesar de haber recibido la provincia en mal estado.
-¿La campaña no se centra demasiado en Cornejo?
-Él lidera el equipo. Hacía falta liderazgo para una provincia desquiciada financieramente y con problemas. Hoy se pagan sueldos, hay clases, insumos en los hospitales.
-¿Cómo lleva eso al Congreso?
-Quiero ser embajadora de Mendoza en la Nación, nexo para lograr recursos y obras. En el Congreso no sólo se hacen leyes, también se designan presupuestos, se destinan obras y hace falta presencia fuerte.
-¿A quién le responderá en el Congreso?
-Al bloque de la UCR. Y a los intereses de Mendoza, que hoy representa Cornejo. Trabajaremos para que al Gobierno le vaya bien. Sanz está en lo mismo. Él asesora a Macri, que tiene la virtud de escuchar. Y a Ernesto lo escucha mucho.
-¿Se identificará con Macri?
-En las cosas que sirvan a los intereses de Mendoza, sí.
-¿Macri está haciendo las cosas bien?
-Es un buen presidente en una Argentina muy difícil. El 30% de pobres no lo inventó él. De un país en default, sin reservas, con un déficit más alto que el de 2001, no se sale de un día para otro. El año pasado fue duro pero ahora empezamos a ver crecimiento. Podemos terminar con 3% de crecimiento, la mitad de la inflación de 2016. El diálogo y no ser un gobierno autoritario es otro logro. Dar las batallas que no se dieron, como contra el narcotráfico, lo vemos ahora.
-¿Qué proyectos llevará?
-Primero, trabajar por los intereses de Mendoza, no ser como los que se instalan en Buenos Aires y se olvidan. Seguiré recorriendo y llevando los problemas para buscar soluciones en común. Estaré en la comisión de salud, trabajaré para que el PAMI tenga más autarquía en Mendoza y las decisiones estén más cerca de los jubilados. Me interesa garantizarle salud a los niños, educación. También cómo insertar a los chicos en el mundo laboral.
-Otros hablan del tarifazo, ¿Usted qué opina?
-Las tarifas son un problema. No pueden costar centavos, pero tampoco se pueden llevar medio sueldo. El aumento debe ser progresivo y no mayor de determinado porcentaje del salario. Hay que trabajar la tarifa social, porque su abanico es amplio, pero si hubiera gente que se queda afuera hay que ampliar ese abanico.
-¿Qué es lo peor de Cornejo?
-Es muy obsesivo en todo y el Estado es inabarcable.
-¿Y de Macri?
-Tomó algunas medidas que cayeron mal, como lo de las pensiones no contributivas. Podría haberlas revisado, dar 6 meses y haber rectificado eso. Pero bueno, dio marcha atrás.
-Lo ha hecho varias veces
-Sí, pero no está mal que lo reconozca. Yo por mi parte, desde el Congreso pienso darle al Gobierno nacional sensibilidad social.
Perfil
Claudia Najul (55), está casada y tiene tres hijos de 27, 22 y 19 años.
Es farmacéutica y siempre trabajó en la esfera pública. De hecho, es jefa de sección Farmacia del hospital Lagomaggiore, de donde se tomó licencia al asumir como senadora provincial. “Ese cargo está en reserva, por ocupar un cargo de mayor jerarquía”, recuerda.
Fue directora de Farmacología durante el gobierno de Roberto Iglesias y de Planificación de Salud en el de Julio Cobos. En abril de 2014 asumió como senadora provincial y desde febrero pasado es ministra de Salud, donde ha pedido licencia por las elecciones. Renunciará si llega al Congreso.
