En el barrio se juegan muchas cosas, pero la más importante es el honor.
Si bien los cráneos que organizaron este Federal A le sacaron un poco el gusto a los clásicos, ya que en una decisión muy poco inteligente decidieron cruzar a los “primos” cuatro veces en esta rueda. Un despropósito.
Estos partidos se tienen que jugar dos veces al año, una vez en cada cancha y listo. Y así generar esa expectativa que hay antes de un derby entre los jugadores y los hinchas, pero no... hasta eso nos quitaron en este desordenado fútbol argentino.
Pero bueno, la música está sonando y hay que bailar el tema que nos toca.
En este partido se enfrentan las dos realidades. Es que Gutiérrez viene en plena levantada en rendimiento y resultados, además de querer vengar la goleada de la rueda pasada. Mientras que Maipú llega con una derrota en la espalda y con problemas de lesiones.
En el Celeste, Alejandro Abaurre no podrá contar con Nicolás Dávila que no está totalmente recuperado de un golpe en el tobillo izquierdo, pero además arrastra un problema muscular.
Su lugar será ocupado por otro pibe de la casa: Franco Maldonado. El Mañoso es el elegido por el “Cachorro” para compartir la mitad de la cancha con Emanuel Díaz.
El resto será el mismo equipo que viene de ganar su primer partido en el torneo.
Por el lado del Cruzado, Carlos Sperdutti esperó hasta último momento a Agustín Roques, pero el carrilero no está en condiciones de jugar y por eso su lugar será ocupado por Judelín Aveska.
La duda pasa por el lugar que ocupará el haitiano, ya que podría jugar carrilero por la izquierda y así el “Gringo” podría mantener su esquema predilecto: 4-3-1-2.
Pero también está la variante de que juegue como lateral derecho y cambiar a un 4-4-2 con Cristian Jofré arrancando desde la izquierda.
Todas estas especulaciones se ratificarán o se caerán a pedazos cuando Pablo Echavarría arranque el partido.
Lo que está claro que es esto es un clásico de barrio y nadie lo quiere perder (por más que sea el tercero en dos meses), por eso será imperdible.