Cinco preguntas y cinco respuestas al tiroteo de San Bernardino que sacude a EEUU

Aún no se sabe por qué una pareja mató a 14 personas y dejó heridos graves en California. Pero así son y así se conocieron los asesinos.

Cinco preguntas y cinco respuestas al tiroteo de San Bernardino que sacude a EEUU

Una pareja fuertemente armada y vestida con equipo militar abrió fuego contra una fiesta de Navidad el miércoles, matando a 14 personas e hiriendo de gravedad a más de una docena. Los sospechosos murieron después en un tiroteo con la policía. Esto es lo que se sabe sobre ellos.

¿Qué provocó los disparos?

La policía no tiene un motivo para los tiroteos, que terminaron con una balacera en una calle de San Bernardino en la que murieron Syed Rizwan Farook, de 28 años, y Tashfeen Malik, de 27.

Eran los únicos agresores del tiroteo, según las autoridades. Su familia dijo que los sospechosos estaban casados. Los investigadores no han descartado un vínculo con el terrorismo y también estudian la posibilidad de que una disputa laboral desencadenara la masacre en el centro de servicios sociales para discapacitados.

¿Quiénes son los sospechosos y cómo se conocieron?

Farook nació en Illinois y creció en el sur de California, dijo Hussam Ayloush, director ejecutivo del Council on American-Islamic Relations. Su familia tiene su origen en Paquistán, señaló.

Farook viajó este año a Arabia Saudí y regresó con una esposa, dijo su compañero de trabajo Patrick Baccari, que asistió a la fiesta del miércoles pero estaba en el baño cuando comenzaron los disparos.

Farook estuvo fuera aproximadamente un mes en primavera, y a su vuelta se comentó que se había casado. La mujer, a la que describió como farmacéutica, se reunió con él poco después en Estados Unidos y pronto tuvieron un bebé. La policía describió a Malik como la esposa o prometida de Farook.

¿Cómo ocurrió?

Baccari, que sentó en la misma mesa que Farook en la fiesta, dijo que los empleados estaban descansando antes de tomarse fotos de grupo cuando Farook desapareció de improviso, dejando su chaqueta sobre la silla. Baccari había salido al baño cuando oyó las detonaciones.

"Me empezaron a golpear pequeños pedazos de metal que se desprendían de las balasy caímos al suelo", narró.

Los disparos duraron unos cinco minutos, dijo, y cuando se miró en el espejo vio que sangraba. Varias esquirlas le golpearon en el cuerpo, el rostro y los brazos.

"Si no hubiera estado en el baño, probablemente estaría muerto en el suelo'', dijo.

¿Cómo reaccionó la familia?

Los sospechosos Farook y Malik dejaron a su hija de seis meses con la madre de Farook el miércoles por la mañana y dijeron que tenían una cita con el médico, dijo Ayloush, del Council on American-Islamic Relations.

Ayloush basó sus declaraciones en conversaciones que había tenido con el cuñado de Syed Rizwan Farook, Farhan Khan, que compareció en una rueda de prensa el miércoles por la mañana como representante de la familia.

Pero pasadas varias horas, los jóvenes padres no regresaron a por su hija y su familia se preocupó cuando no pudieron localizarles tras ver las noticias sobre el tiroteo.

Al principio, la familia pensó que Farook pudiera ser una de las víctimas porque sabían que trabajaba como inspector medioambiental en el Departamento de Salud del condado y en ocasiones trabajaba en el Inland Regional Center, dijo Ayloush.

La familia sólo empezó a hacerse una idea de lo que ocurría en torno a las dos de la tarde, tres horas después de la balacera, cuando un periodista llamó haciendo preguntas, dijo Ayloush. La policía interrogó a los familiares más tarde el miércoles.

"No conocemos los motivos. ¿Está relacionado con el trabajo, la raza, es una enfermedad mental, es ideología extrema? En este momento, es realmente desconocido para nosotros y en este momento es demasiado pronto para especular'', dijo Ayloush.

¿Qué pensaban de Farook sus compañeros de trabajo?

Baccari dijo que su compañero, que dijo haber crecido en una granja con cabras y gallinas, era una persona reservada. Hace varios meses se dejó barba.

Parecía una persona comprometida con su familia y nunca mostró un comportamiento inusual ni expresó opiniones políticas radicales.

Sus compañeros dijeron al Los Angeles Times que Farook era un musulmán devoto pero nunca hablaba sobre religión en el trabajo.

Griselda Reisinger, que trabajó con Farook antes de dejar su empleo en mayo, dijo al periódico que "nunca me pareció un fanático, nunca me pareció sospechoso''.

Tenemos algo para ofrecerte

Con tu suscripción navegás sin límites, accedés a contenidos exclusivos y mucho más. ¡También podés sumar Los Andes Pass para ahorrar en cientos de comercios!

VER PROMOS DE SUSCRIPCIÓN

COMPARTIR NOTA