El suelo en una casa es tan importante como otros elementos. A veces necesitamos darle una nueva cara a los diferentes espacios y no lo hacemos por miedo a encarar grandes obras. Nos preocupa el tiempo y el dinero, por eso queda en solo un deseo y no en algo concreto.
En esta nota te contamos algunas ideas para que cambiar los pisos de casa no sea imposible y puedas hacerlo sin hacer ningún tipo de obra.
Suelos de vinilo
Una de sus grandes ventajas es que no necesita grandes esfuerzos. Tienen una capa impresa de acabado, algo que ofrecerá un sinfín de diseños. Pueden imitar sin problemas cualquier otro material, como por ejemplo la madera, piedra mármol.
Es un material muy resistente, hipoalergénico y con propiedades aislantes.
Además de la variedad de modelos y su colocación sencilla, en especial los suelos de vinilo autoadhesivos , pues vienen con un pegamento en su cara inferior y sólo es necesario tener la superficie limitada (no es necesario quitar el suelo anterior).
Suelos laminados
Estos surgieron como alternativa a la madera. Suelos que imitaban a la perfección este material, pero que eran mucho más resistentes y aguantaban el agua sin estropearse.
Son los que más se suelen colocar a la hora de realizar algún tipo de reforma. Necesitan un suelo previo regular y sin desniveles.
El grosor de este pavimento va desde los 6 y hasta los 12 mm. Son también fáciles de instalar, pues la mayoría incorpora este sistema de click tan práctico. Además, son bastante duraderos, y se pueden colocar en baños y cocinas.
Porcelánico machihembrado
Se instalan sobre el suelo, uniendo las baldosas con otras a través de su sistema machihembrado.
Se cortan como otros azulejos, pero no hay que usar cemento, en muchos casos no es necesario ni rejuntar.
Pavimentos de microcemento
El microcemento está de moda. Es un material que también permite una colocación sin levantar el suelo anterior.
Si bien, necesario realizar una pequeña obra, se ahorra en levantar el piso anterior.
Tiene un espesor bastante escaso, una colocación sencilla y da un acabado industrial muy decorativo.
Suelos de linóleo
El linóleo como suelo es una opción interesante.
Hay gran variedad de colores y es un material que aguanta muchísimo el desgaste.
Simples de limpiar, es antiestático y repele el polvo.
Su colocación es sencilla, pues muchos modelos cuentan con una capa adhesiva por la parte posterior.