A cinco años de cárcel fue condenado Gerardo Juan González (73), el ingeniero que condujo ebrio durante 15 kilómetros por Acceso Este a contramano y mató a tres personas en un tremendo accidente vial.
Luego de deliberar durante siete horas, los jueces de la Séptima Cámara (Belén Salido, Gabriela Urciuolo y Agustín Chacón) concluyeron que se trató de un homicidio culposo (un accidente) y a la pena de prisión le sumaron una inhibición de diez años para conducir autos.
Además, indicaron que el día en que la sentencia quede firme deberá decidirse si va a la cárcel o cumple la pena en su casa.
Los familiares de las víctimas -el matrimonio que conformaban Pedro Grigor (70) y Marta Isabel Arena (56) y una amiga de ambos, Graciela Fornabaio (67)- se mostraron en total desacuerdo con la sentencia.
"Me dan vergüenza estos jueces. No se puede seguir con estas leyes. Esto no sirve: cualquiera mata a tres personas y le dan cinco años", dijo Marta Grigor.
"Espero que al menos cumpla la pena, aunque sea en su casa, y que ahí tome conciencia del daño que nos hizo", agregó Andrés Grigor.
En cambio, el ingeniero y sus familiares celebraron la sentencia -es improbable que vaya preso- y se marcharon sonrientes y sin hacer declaraciones.
Criterio
Siguiendo el criterio de la Corte provincial, los camaristas consideraron que se trató de un accidente, un homicidio culposo (con penas de 3 a 5 años de cárcel) y no un homicidio simple (con penas de 8 a 25 años).
Durante los alegatos, la fiscal de Cámara Daniela Chaler había considerado el caso como un homicidio simple y por ello pidió para el imputado una pena de 8 años y 6 meses de prisión.
Una pena más alta -12 años- fue el pedido que realizó Juan Carlos Ruiz, abogado de la familia de las víctimas.
Los jueces consideraron uno de los pedidos realizados por el defensor del ingeniero, Oscar Dimas Agüero, quien solicitó la absolución de su cliente porque consideró que es inimputable, o bien tres años de cárcel por homicidio culposo.
"Al ir alcoholizado, cuando la gente le avisaba que iba en contramano y sin luces, necesariamente conocía el riesgo de muerte, y aun así manejó", fue uno de los planteos que hizo la fiscal Chaler y que grafican el caso.
Todas las falta posibles
En la noche del 21 de abril de 2012 el ingeniero fue a un asado donde bebió algunas copas de vino -horas más tarde una prueba de alcoholemia le dio 1,33 gramos por litro de sangre- y luego, conduciendo su Peugeot 307 por el Acceso, protagonizó un choque frontal contra el Honda Civic de Pedro Grigor.
Juan González cometió casi todas las falta posibles: no tenía carnet, conducía en contramano, iba sin luces.
"Los autos chocaron de frente e hicieron como un volcán, una pirámide, dijo una amiga de los Grigor que iba en otro vehículo, muy cerca del auto de las víctimas. "Los autos se levantaron como dos metros y medio. Yo vi la parte de abajo de los vehículos", afirmó otro testigo.
