Cerca de 700 migrantes africanos embistieron ayer la valla que protege la frontera española en la colonia norafricana de Melilla, y se enfrentaron con policías de España y Marruecos.
España dijo que 140 de los migrantes lograron entrar en territorio español a pesar de los esfuerzos de la policía fronteriza.
Es el más reciente aumento en la ola de inmigrantes africanos que tratan de cruzar a Europa.