El precio de la carne de cerdo en China trepó 116% anual en enero, como consecuencia directa de la "fiebre porcina" que redujo en más de 50% el stock de cerdos de la República Popular en el último año y medio (unas 450 millones de cabezas).
También el precio de los lechones en los mercados chinos ha alcanzado un récord de U$S 12 por kilogramo, lo que asegura que los valores de la carne porcina permanecerán elevados el resto del año.
Esto significa que el efecto disruptivo provocado en las cadenas agroalimentarias de la República Popular, por la epidemia del coronavirus, se sobrepone e intensifica con el shock desatado por la "fiebre porcina". El resultado ha sido un debilitamiento extremo del sistema de producción de carnes, sin excepciones de ningún tipo.
La prioridad para el gobierno chino ahora, tras controlar el Coronavirus en sólo doce semanas (15/12/2019 a 13/03/20), es restaurar la logística del transporte de productos en toda la República Popular, en especial en Hubei, la provincia epicentro de la crisis, situada en el centro del país, y que ha sido hondamente golpeada en los tres primeros meses del año.
Lo previsible es una leve disminución del precio de la carne de cerdo en el segundo trimestre, con una tendencia a la normalización en los niveles previos a los del cuarto trimestre de 2019, en el segundo semestre de este año.
Más de 100 millones de unidades aviarias han sido eliminadas por los productores de Hubei ante la imposibilidad de alimentarlos, debido a la ruptura de la cadena logística ocurrida entre enero y marzo de 2020.
Esto representa menos del 1% de la producción aviaria china en 1 año (9.300 millones de unidades), lo que implica que la República Popular aumentará necesariamente las importaciones de aves, sobre todo de EEUU y Brasil, en un porcentaje que puede estimarse en un 20% o 30% en el segundo semestre de 2020.
El grado completo de integración alcanzado por las cadenas transnacionales de producción cárnica lo revela el hecho de que Cargill, la principal empresa agroalimentaria de EEUU, ha aumentado sus ganancias 19% anual en el primer trimestre de 2020, debido al alza de sus ventas de proteínas -carnes y huevos- a la República Popular.
Cargill dispone de plantas de producción de carnes en China, Australia, Polonia, Colombia y Filipinas, entre otros países.
El resultado ha sido que Cargill se ha recuperado de las pérdidas sufridas en la denominada "guerra comercial entre EEUU y China"; la estimación ahora es que sus ganancias aumentarán todavía más por el auge de la demanda china en la segunda parte del año.
El efecto del coronavirus sobre la producción de carnes en China ha sido doble: el precio de la carne se mantiene en un nivel elevado, a pesar del aumento de las importaciones y de la utilización de las reservas de seguridad del Estado, mientras que los valores de las aves tienden a disminuir, debido al cierre prácticamente total de las cadenas de restaurantes.
La estimación del gobierno es que la economía china se recuperará a partir del segundo trimestre de este año, con un crecimiento del 4% al 5% en ese período, normalizándose plenamente en el tercer trimestre, con un alza de 6,5%/7% anual, previéndose que volverá el boom de consumo (U$S 6,9 billones) que estuvo vigente hasta diciembre de 2019, en el 2do. semestre de 2020.
El Banco del Pueblo de Pekín (BoP) -el Banco Central chino- ha lanzado una formidable inyección de liquidez con una disminución de 30% en los encajes obligatorios de la red de banco del país, con otros U$S 78.000 millones que serán incorporados en el segundo trimestre del año, además de bonos especiales por U$S 30.000 millones para las pequeñas y medianas empresas, incluyendo las agroalimentarias.
Las exportaciones de la República Popular cayeron 17% en los primeros 2 meses del año, pero se ha producido una recuperación nítida a partir de la segunda semana de marzo, previéndose un aumento de 20% al 30% en los siguientes 15 días.
Es el efecto de la recuperación plena (98% del total) de la actividad de las compañías transnacionales radicadas en la República Popular, tras la resolución, en sólo 12 semanas, de la crisis provocada por el Coronavirus.
Las firmas transnacionales son responsables de más de 60% de las exportaciones de la República Popular, porcentaje que aumenta a 70%/80%/90% a medida que se escala en la cadena del valor agregado y la complejidad tecnológica.
Todo lo que sucede en China en materia alimentaria tiene inmediato impacto mundial.