El presidente Sebastián Piñera admitió que Chile no cuenta con policías suficientes para mantener el orden en un país sacudido desde hace 41 días por incesantes protestas.
El mandatario aludió al tema tras una jornada de actos vandálicos en distintos puntos del país que incluyeron el saqueo e incendio de un hotel con pasajeros y empleados en el norte, ataques a tiendas y cortes de rutas. Dijo que "la delincuencia organizada le está causando un grave daño al país'' y que desde el estallido social del 18 de octubre la "ola de violencia" ha dejado 2.210 policías heridos, 188 cuarteles y 971 vehículos atacados.
“Llegó el momento de decir basta, el gobierno está haciendo su trabajo. La violencia ya causó dolorosas pérdidas humanas y muchos lesionados”, agregó.
En referencia al control de la calle y a la falta de efectivos, Piñera dijo: "Hoy día nuestros policías no cuentan con la dotación suficiente para cumplir con su misión''.
Miles de comercios, grandes y pequeños, han sido saqueados, muchos de ellos sin que la policía llegara al lugar para impedirlo.
“Somos muy conscientes de que enfrentan grandes problemas para cumplir con eficacia’’ las tareas de seguridad, añadió.
“Sobrepasados”
El ministro de Defensa, Alberto Espina, reiteró los dichos de Piñera y aseguró en el Congreso que los policías están "absolutamente sobrepasados'' frente a una "situación crítica''.
La analista Lucía Dammert, académica de la Universidad de Santiago, dijo que "efectivamente la policía ha demostrado limitaciones efectivas para enfrentar la ola de violencia en Chile. Especialmente dados los informes de derechos humanos que evidenciaron el uso excesivo de la fuerza''.
Adolfo González, investigador del Centro de Estudios en Seguridad Ciudadana de la Universidad de Chile, agregó por su parte que “aparece como un elemento positivo el reconocimiento de que las fuerzas policiales están superadas’’.
Añadió que "las policías se han concentrado fundamentalmente en el control público de la manifestaciones y no han logrado ser eficientes en el control de saqueos, de centros de distribución y de comercio. Y por lo tanto lo que se ha instalado es una desconfianza sobre la capacidad efectiva que hoy están demostrando las policías para contener los fenómenos que están generando inseguridad''.
Piñera urgió al Congreso para que despache proyectos de ley que establecen penas para los encapuchados, saqueadores y quienes levanten barricadas, y otro que firmó la víspera que autoriza a los militares a que protejan infraestructura pública como hospitales, el subterráneo, establecimientos sanitarios y eléctricos, para relevar a los policías que actualmente las vigilan.
Cuestionamientos
La policía chilena está severamente cuestionada por organizaciones internacionales defensoras de derechos por la fuerte represión de las protestas que dejaron más de 2.500 lesionados, incluidas cerca de 300 personas con severos traumas oculares.
Un universitario que fotografiaba una protesta recibió impactos de balines en ambos ojos y quedó ciego y la víspera una mujer que acudía a su trabajo recibió una bomba lacrimógena en la cara y perdió su ojo izquierdo, informó Miguel Yáñez, abogado de la familia de la trabajadora.
En medio del caos y las protestas el dólar sigue su racha alcista. De 709 pesos hace 41 días, el miércoles escalaba a 819 dólares.
Piñera, sin Cumbre
El presidente de Chile no acudirá a la cumbre climática que se celebrará la próxima semana en Madrid para hacer frente a la oleada de protestas que sacude a su país, dijo ayer la ministra de Medio Ambiente chilena, Carolina Schmidt que presidirá la COP25.
Naciones Unidas acordó el mes pasado reubicar la cumbre climática en España por las virulentas movilizaciones antigubernamentales.
Durante la COP25, que se celebrará entre el 2 y el 13 de diciembre, los países establecerán las reglas para alcanzar el objetivo acordado en el Acuerdo de París de 2015.