El gobierno de Chile expulsó del país al cura irlandés John O'Reilly, exlíder local de la orden de los Legionarios de Cristo, quien cumple una condena de cuatro años en libertad vigilada por abuso sexual contra una menor.
"Revóquese el permiso de permanencia definitiva en el país al extranjero John Joseph O'Reilly de nacionalidad irlandesa (...) deberá hacer abandono del país en un plazo de 72 horas, a contar del momento que sea notificado, si no existiesen causas o penas pendientes", indicó una resolución del Ministerio del Interior de Chile difundida hoy por medios locales.
La justicia chilena condenó en noviembre de 2014 al sacerdote O'Reilly a una pena de cuatro años y un día, que cumple bajo libertad vigilada, tras ser encontrado culpable de abuso sexual reiterado contra una menor entre 2010 y 2012, en un exclusivo colegio de la orden de Los Legionarios de Cristo en Santiago.
O'Reilly también fue inhabilitado perpetuamente para ejercer cargos en escuelas o profesiones relacionadas con menores, y fue absuelto de abuso sexual a la hermana mayor de la menor al estimar que no había pruebas.
La expulsión del sacerdote europeo se hará efectiva una vez que cumpla su pena. El religioso puede recurrir ante la Corte Suprema para evitar su expulsión.
La decisión del gobierno chileno fue adoptada debido a que "la conducta ejecutada del extranjero vulnera los bienes jurídicos de la integridad, libertad e indemnidad sexual y la seguridad pública, lo que genera graves consecuencias sociales", explicó la resolución.
El Congreso chileno decidió en marzo pasado revocarle la nacionalidad por gracia que le había entregado a O'Reilly en el 2008, luego de 14 años de haber llegado a Chile durante los que se convirtió en el rostro de la ultraconservadora Congregación Legionarios de Cristo.
Esta congregación ha estado en el centro de un escándalo mundial por el comportamiento de su fundador, el mexicano Marcial Maciel, fallecido en 2008, acusado de abusos sexuales a menores y quien mantuvo una doble vida con dos mujeres y varios hijos.
Una veintena de sacerdotes han sido acusados de pederastia en Chile, y al menos cinco de ellos fueron condenados por la justicia, en un país de gran influencia de la Iglesia Católica.