Basta hojear un diario para encontrar hechos que tienen como protagonistas a varones adolescentes. Accidentes de tránsito, abuso de sustancias como alcohol y drogas, y muertes violentas, son algunas de las que reflejan los medios. Pero hay otras que no necesariamente llegan a este nivel de exposición pero que perciben cotidianamente quienes se vinculan con ellos.
Se trata de un segmento que, por estar expuesto a ciertas realidades, sumado a características propias de la edad y el género, queda en una posición de vulnerabilidad. Justamente por estas últimas causas también les resulta difícil identificar el riesgo al que se enfrentan.
Las problemáticas y situaciones de riesgo que involucran a los varones adolescentes son diversas y tienen matices según el ámbito en el que se muevan. Para quienes tienen acceso a un vehículo y consumen alcohol, el riesgo estará en un accidente vial. Quienes no tienen auto pero viven en sectores más vulnerables, quizás sea -ante la necesidad de conseguir dinero- terminar involucrado en una red de comercio ilegal de drogas, por ejemplo.
Consumo problemático
La fiesta electrónica Time Warp, que se realizó en Buenos Aires, dejó 5 jóvenes muertos y otros internados por el consumo de drogas de diseño. El hecho desnudó frente a la sociedad el consumo abusivo de sustancias y sus consecuencias más crudas. Algo no circunscripto sólo a estos eventos sino que está instalado como práctica entre muchos jóvenes. Ellos mismos comentan que en los boliches se ofrecen drogas ilegales con naturalidad.
Lidia Talamona es directora de un Cebja que recibe a jóvenes del Oeste de Godoy Cruz y dice que se trata de “chicos muy carenciados que recurren a las drogas”. Contó que varios llegan a clase con un consumo previo de alguna droga: “Hay que aislarlos del grupo porque distorsionan todo y afecta a los que realmente quieren aprender”. Aseguró que van camino a la escuela bebiendo “petaquitas” con alguna bebida alcohólica que luego encuentran tiradas dentro del establecimiento.
Talamona aclaró que no todos los chicos tienen estas conductas, sino que “hay un grupito que siempre viene drogado y que incluso les pedimos que traten de aguantarse unas tres horitas”.
La docente reconoció casos de agresiones sufridas por los alumnos por estar vinculados al comercio de drogas: “Venían a la salida del colegio bandas de otros barrios a ajustar cuentas”. Justamente son éstas las hipótesis que surgen cuando algunos jóvenes son baleados, ya que se estima que son usados en este tipo de comercio porque, al ser menores, no pueden ser imputados.
“Son víctimas de abandono, de violencia... y en general tienen baja autoestima. Nosotros tratamos de que los chicos reeduquen sus conductas para que se reinserten en la sociedad y puedan conseguir un trabajo digno, porque muchos trabajan con carretelas”, sintetizó Talamona.
Droga legal
Para el director de Toxicología de la provincia, Aldo Sergio Saracco, peor que el consumo de drogas ilegales es el abuso de las legales, particularmente el alcohol. Es que el estado de ebriedad está asociado a accidentes de tránsito, riñas y relaciones sexuales no cuidadas.
Hugo Fiorens es director de Relaciones con la Comunidad del Ministerio de Seguridad pero además tiene experiencia en el tema ya que es fundador de Voluntarios en Red, una ONG que ha llevado estadísticas en cuanto a accidentes viales (e intervenido en el asunto), entre otros, relacionados con los jóvenes. Comentó que uno de los problemas que se presentan es que los menores intentan ingresar a boliches para mayores de 18 años.
Para ello apelan a documentos prestados o falsificados. Una vez adentro, son tratados como mayores por lo que se les vende alcohol sin reparos. Los que no entran van de un boliche a otro hasta que los dejan entrar a alguno. Pero el asunto es que “ya llegan alcoholizados desde las previas o las hacen en las playas de estacionamiento de los boliches: abren el baúl y tienen de todo”.
Fiorens destacó que por el consumo de alcohol también se llega a situaciones de violencia. Por eso dijo que desde su área se trata de fortalecer el cumplimiento de la ley de Diversión Nocturna. Señaló que “desde el Ministerio queremos abrir el debate sobre quién es el verdadero responsable de todo esto, porque desde lo público se puede hacer algo pero los primeros responsables son los padres”.
Relaciones sexuales
El director de una escuela secundaria comentó que en el marco de los talleres de educación sexual que dictan, sorprende la cantidad de dudas que los adolescentes tienen en este plano.
La creencia de que nunca les va a suceder nada les impide tomar conciencia sobre los riesgos. Ocurre que mantener relaciones sexuales sin cuidados implica no sólo la posibilidad de un embarazo sino, además, de adquirir alguna enfermedad.
Por supuesto, la llegada de un hijo en esta etapa de sus vidas será determinante, ya que la nueva responsabilidad implicará la necesidad de un ingreso para mantenerlo y esto obstaculizará la continuidad de sus estudios.
Desde el Programa de Salud Integral en Adolescencia provincial reconocen la necesidad de acercarse a los adolescentes y las dificultades para concretarlo. Es que por ser eminentemente sanos, no suelen consultar al médico y mucho menos los varones.
“La temática de embarazo adolescente tiene complejidad. Hay barreras propias del adolescente y las que existen para acceder al sistema de salud. Por eso se plantea la posibilidad de ampliar los horarios de atención. Es uno de los temas que más reclaman”, dijo su titular, Cecilia Sottano. La decisión implica un abordaje integral: “Queremos que los varones se hagan responsables de cuidarse”.
Darles información, la clave
Uno de los elementos que más inciden en algunas de las conductas y circunstancias en las que se encuentran los varones adolescentes de hoy es el desconocimiento y la desinformación.
Para el director de Toxicología, Aldo Sergio Saracco, los jóvenes no saben ciertamente las consecuencias del consumo de sustancias ni son conscientes de que hacerlo en determinado contexto puede potenciar los efectos secundarios (como en la tragedia de Time Warp). Por eso, desde su punto de vista, hay que darles información para evitar daños más graves.
Otro tanto ocurre con las dudas en cuanto a los recaudos a tomar para cuidarse en una relación sexual. Cecilia Sottano señala la violencia entre pares como otro tema que requiere atención inmediata para evitar muertes. “No existe un efector exclusivamente para varones, por eso se está estudiando la posibilidad de generar uno para la consulta en el cual también puedan surgir estos temas, como el cuidado sexual, cómo relacionarse con la otra persona (incluye violencia de género) y el consumo de sustancias”.