Último lugar que visitaste: Brasil.
¿Qué no puede faltar en tu equipaje? Ropa en una sola gama de colores, así llevo un solo par de zapatos, una blusa negra y un pantalón negro que, con un buen accesorio, estás ¡perfecta! Zapatillas y un conjunto para gym, además de mucha paciencia. En lo posible en grageas concentradas.
¿Matás o te matan las horas en los aeropuertos? Las mato. Hijos y amigos felices por los regalos resultantes; también librerías Santa Fe por la cantidad de e-book que compro para leer.
¿Ventanilla o pasillo? Siempre pasillo y adelante. ¡Si es el primer asiento, mejor!
¿Qué es lo primero que hacés cuando llegás a un nuevo lugar? Si fueron muchas horas de viaje, un buen baño de inmersión y caminar. En general salgo a las primeras reuniones después del baño. Si no hay reuniones y hay tiempo libre, investigo qué hay de interés.
Un sabor nuevo que hayas descubierto en un viaje. Muchísimos, especialmente de frutas exóticas que no conocemos en nuestro país y que me ayudan a describir mejor los vinos.
¿Cuáles son los requisitos para tus vacaciones ideales? Buena compañía con ganas de divertirse; buena onda y si es en la playa, mucho mejor. Un buen spa y mínimo tres semanas.
¿Cumplís con algún ritual personal cuando viajás? No, sólo pido a Dios poder regresar sana para volver a ver a mi familia.
¿Qué traés de tus viajes? Lo que me guste: regalos para mis hijos y algo para mi casa.
¿Qué es lo que más y lo que menos te gusta de la vida de hotel? Lo que más me gusta son los buenos gimnasios y spas. Lo menos, que son muy impersonales. Por eso trato de ir a los mismos en cada destino. Terminan conociéndote y te hacen sentir mas como en casa. Es fea la soledad cuando te quedás en tu habitación y no es la de tu casa.
Una ciudad del mundo en la que vivirías: Muchas. Todas tienen su encanto pero me gusta especialmente Napa Valley (EEUU) y Montalcino, en Italia.
Una ciudad para compras: Para ropa de diseño: Milán, Madrid y París. Para todo: Londres, Miami y NY. Para media calidad y barato:
China, (Pekín o Shanghai). Para exótico y hermosos trabajos a mano: la Vieja Delhi o Nueva Delhi, India.
Un destino romántico: Playa en Turk & Caicos. Una ciudad: París.
Un sitio para visitar con amigos: Muchísimos. Mis favoritos: las rutas del vino y los quesos en Francia. Buenos vinos y excelente gastronomía: Toscana en Italia. Polinesia.
Un destino que te sorprendió: India.
Y uno que te decepcionó: Ninguno. Todos tienen su encanto, o al menos yo se los encuentro.
Un recuerdo de vacaciones: Tantos.... Pero el mejor: las últimas con mi familia, muy divertidas y con buena onda. Todos unidos.
El lugar al que siempre podrías volver: ¡¡Todos!!
Un destino pendiente: Tailandia
Tu próximo viaje: Estados Unidos y el camino de Santiago de Compostela.
El Camino de Santiago
Se trata de la ruta de peregrinación más importante de Europa y fue declarada, por la Unesco, Patrimonio de la Humanidad. Hay varias sendas posibles para llegar a Santiago de Compostela. Para recibir el certificado del peregrino al menos hay que caminar 100 km. Para demostrar que se cumplió el cometido, hay que llegar con la credencial del peregrino debidamente sellada a lo largo de la ruta tanto en iglesias, albergues, catedrales, ayuntamientos, entre otros sitios habilitados.
Para estos últimos 100 km también hay unos cuantos trayectos que el viajero seleccionará según la época en la que realiza el periplo, su estado físico y lo que quiera encontrar a la vera.
Los albergues de peregrinos tienen precios módicos, de 10 a 25 euros. Además hay muchas agencias europeas que ofrecen tours completos de 3, 5 y 7 días cargando con valijas y proponiendo alojamientos confortables y traslados. Los precios, desde 480 euros.
