Se realizó ayer por la mañana un corte de media calzada en la ruta 40, a pocos metros del ingreso al departamento de Tunuyán. El motivo de la protesta, fue el despido de 146 trabajadores de la empresa Salentein Fruit, dedicados al empaque de frutas de producción propia.
Si bien la compañía cumplió estrictamente con todos los requisitos que exige el marco legal al momento de despedir a sus empleados, el reclamo se centra en los problemas sociales que la situación genera.
Representados por el Sindicato de Trabajadores de la Industria del Hielo y Mercados Particulares de la República Argentina (Stihmpra), los ex empleados de Salentein piden explicaciones a la empresa de capitales holandeses sobre las causales de despido. Buscan, además, una alternativa de empleo a futuro.
Osvaldo Marín, director de Relaciones Laborales de la Subsecretaría de Trabajo de Mendoza, reveló que el próximo viernes se realizará una audiencia entre el gremio, directivos de Salentein Fruit y el Gobierno para tratar de conciliar la situación. "Buscaremos reincorporar a los trabajadores en futuras actividades de la empresa", explicó el funcionario.
Esta posibilidad, dependerá de cuáles sean los motivos reales del cierre del galpón de empaque de frutas. Ante la consulta de Ricardo Nasif, jefe de la delegación de Tunuyán de la Subsecretaría de Trabajo de Mendoza, los directivos de Salentein justificaron los despidos por ser "un negocio inviable" en cuanto a lo económico.
Por el momento, desde la compañía no se hicieron más declaraciones, pero entre trabajadores y miembros del Gobierno circulan diferentes versiones de qué ocurrirá a futuro.
"Pensamos que el cierre del galpón puede significar la reinversión hacia otra actividad, como la construcción de una nueva bodega. En ese caso, se abriría la posibilidad de recontratar al menos parte del personal echado", comentó Nasif.
Otro alternativa, es que una segunda empresa del sector privado compre el galpón. Esta es la versión más temida por los trabajadores ya que nada justificaría su continuidad en el empleo. Nasif no descarta que esto ocurra, considerando que el lugar contiene tecnología avanzada en perfectas condiciones y se han conservado las fincas fruteras.
En tanto, Pablo Quevedo, secretario general de Stihmpra en Mendoza, contó que existe el rumor de que se utilizará el galpón como depósito de una nueva champañera.
En conclusión, el destino de Salentein Fruit es incierto. Se estima, igualmente, que se lograrán algunos avances en la tarde de hoy, cuando se reúnan el intendente de Tunuyán, Martín Aveiro, con representantes del sector gremial y el ministro de Agroindustria y Tecnología, Marcelo Barg. En el encuentro, se intentará llegar a un preacuerdo entre las partes, previo a una audiencia convocada para mañana a las 10.30, en la Subsecretaría de Trabajo.
Críticas a la empresa
En lo estrictamente legal, no hay cuestionamientos sobre Salentein Fruit. El 15 de setiembre comenzaron a llegar los avisos de despido y, cuatro días después, el 19 de setiembre, se hicieron todos los depósitos correspondientes a las indemnizaciones según antigüedad.
No obstante, el despido de 146 empleados de un día para otro, provocó algunos cuestionamientos desde el punto de vista social: "Existían muchas acciones que pudo haber realizado la empresa antes de echar a 150 personas", remarcó el representante de Trabajo en Tunuyán, Ricardo Nasif.
En este sentido, el funcionario mencionó, a modo de ejemplo, el inicio del trámite de crisis de empresa o el acceso al Programa de Recuperación Productiva (Repro) para el sostenimiento de empleo. "No es obligatorio acceder a estos beneficios, pero hubiera sido importante que Salentein siguiera este camino para que, desde el Gobierno, tuviéramos más facilidades para garantizar el trabajo de esas 146 personas", declaró Nasif.