Aquellos que decían que en algún momento Central se caería porque no aguantaría el ritmo de la pelea por el título, tendrán que seguir esperando. A sólo cuatro fechas del final, el equipo de Coudet pasó con creces otra prueba, aplastó 4-0 a Gimnasia y quedó a tiro del segundo, San Lorenzo, al que enfrenta el sábado. Y sabe que un nuevo tropezón de Boca hasta le abriría espacio para soñar con ese título que no gana desde 1987.
El Lobo demostró desde el inicio que no estaba dispuesto a resignar el rol protagónico. Al equipo de Troglio no pareció importarle el respaldo al local en el Gigante de Arroyito ni mucho menos la excelente campaña del rival. Y así fue como tuvo a los 13’ la primera llegada, con un cabezazo de Mazzola que alcanzó a manotear Caranta.
Pero el Canalla encontró en el talento individual la manera de pasar adelante en el marcador. Iban 26’ cuando después de una buena rotación de pelota, el balón le quedó a Domínguez, quien clavó un remate espectacular, inatajable para Navarro.
Dos más tarde el local logró otro impacto: Ruben quedó mano a mano con el “1” y definió con enorme categoría para el 2-0. En un rato, el partido estaba casi liquidado.
Gimnasia no pudo recuperarse y Central pasó a ser el dominador. Y a los 40’ aumentó más la diferencia cuando Ceballos cobró penal en lo que pareció un leve forcejeo. El mendocino Larrondo aprovechó y con un remate suave le dio al resultado cifras de goleada.
No llamó la atención que el partido se planchara en el ST. El Lobo extrañamente pareció sentirse vencido mientras Central administraba la ventaja. Las llegadas a los arcos eran esporádicas, pero a los 26’ volvió a quedar demostrado que era la tarde del local: Pinola escaló por izquierda y mandó un centro medido que Ruben, entrando por el segundo palo y sin marcas, envió con comodidad a la red.
El Gigante era una fiesta. Ya no hubo espacio para más. Central se quedó con la satisfacción del deber cumplido y la esperanza más fuerte que nunca. En la próxima fecha, irá por San Lorenzo, al que pasaría en la tabla con una victoria. Y en la última, recibe a Boca.