Si bien el arreglo que SUTE concretó los incluye, los celadores no se sienten representados en ningún sentido por ese gremio. De hecho tienen el propio, que es el Sindicato Único de Celadores y Empleados No Docentes de Mendoza (Sucend) pero como no tienen representación gremial en las paritarias están "atados" a lo que suceda con Sute.
En reclamo a eso y a que Francisco Pérez, los reciba, los celadores instalaron a fines de enero una carpa frente a la Subsecretaría de Trabajo. Llevan 75 días ahí y son, dentro del mundo escolar, los que menos ganan.
"El que recién empieza cobra $ 2.800 de bolsillo y $ 3.500 si tiene carga social. Y un celador que lleva 10 años está ganando $ 4.462. El gobernador y el ministro Rodolfo Lafalla nos mintieron. Nos iban a recibir el viernes y no nos atendieron. El gobernador miente y se burla de los que menos tienen. Nos mandaron a los hinchas de Godoy Cruz a que nos pegaran.
Y SUTE también nos vino a pegar por mostrar el bono de sueldo. Lo mostramos para que el señor Mateluna, que no sabe nada de nosotros, vea la miseria que cobramos. Además del salario nos falta ropa de trabajo, implementos, cosas de limpieza, planta permanente, incorporación de compañeros despedidos y el abono para el micro", enumeraron una celadora y un sereno, que estaban ayer por la tarde en la carpa.
