Las transferencias que hizo el Gobierno Nacional a nuestra provincia tuvieron un incremento en términos nominales de 33% el año pasado en relación a 2017. En ese año Mendoza recibió 35.521,4 millones de pesos, mientras que en 2018 fueron $ 47.243,5 millones, es decir 11.722,1 millones de pesos más. Claro que si se descuenta el peso de la inflación calculada por la DEIE (53,7%), la caída de esos dineros enviados a la administración de Alfredo Cornejo fue de 13%.
El dato del ajuste provocado por la inflación es fuerte, sobre todo si tomamos las transferencias corrientes y de capital a todas las jurisdicciones, es decir los fondos nacionales que se reparten de manera discrecional a provincias y municipios. Éstos cayeron 15,4% nominal en 2018, en comparación con 2017. En 2018 se repartieron 155.403,8 millones de pesos, unos 28.354,9 millones de pesos menos que en 2017, según un informe de la Asociación Argentina de Presupuesto y Administración Financiera Pública (ASAP).
Teniendo en cuenta la inflación nacional promedio del 47,6%, si al monto nominal que la Nación transfirió a las provincias se le descuenta la inflación registrada a lo largo de 2018, la caída real alcanza el 47,9%.
Es decir que gobernadores e intendentes tuvieron el año pasado casi la mitad del dinero que les ingresó por transferencias directas en 2017.
Este recorte se inscribe en el marco del plan de ajuste fiscal decidido por la gestión de Mauricio Macri y profundizado a partir del acuerdo de crédito con el Fondo Monetario Internacional. El ajuste se vio potenciado, además, por una inflación tres veces mayor a la proyectada por el Gobierno nacional.
Los números del 2018 dejaron un escenario complicado para los gobiernos provinciales y municipales de cara a mostrar gestión y resultados en obras a lo largo de este año, en el que habrá elecciones.
En términos generales no hay beneficios en los fondos que se reparten bajo índice de coparticipación. En todos los casos los "hachazos" son parejos. La coparticipación de impuestos de 2017 llegó a 19.707 millones de pesos, mientras que en 2018 acumuló 27.554 millones, es decir un 39% más. Considerando la pérdida de poder adquisitivo de ese dinero por la inflación, la provincia perdió un 9%.
Inversiones públicas
Las transferencias de la Nación para gastos de capital registraron una baja anual muy pronunciada, del 28,3%, superior a la disminución de las transferencias corrientes, que cayeron 5,9% anual en términos nominales, indicó la ASAP.
En el caso de Mendoza, estos montos destinados a obra pública subieron en 2018 comparados con los que llegaron en 2017: 2.269 millones contra 2.075 del año anterior, es decir 194 millones que representan un 9,3% más; aunque si se descuenta la inflación, Mendoza recibió un 28% menos, es decir que la caída de fondos en este aspecto fue mayor aunque estuvo en sintonía con el promedio nacional.
La ASAP señaló que para el caso particular de las transferencias de capital a partir del año 2018, las que se realizaban en el marco del Fondo Federal Solidario (FFS) tenían carácter "extrapresupuestario", mientras que el año anterior (2017) formaban parte del presupuesto de la Administración Nacional.
Por otro lado, a mediados de agosto el régimen fue derogado a través del Decreto N° 756/2018. Si se excluye a este Fondo de la comparación interanual, la caída de las transferencias de capital pasa de una disminución del 28,3% anual a un incremento de 3,3% anual en términos nominales.
En definitiva, sacando las consideraciones formales y yendo a los números concretos, las transferencias para gastos de capital alcanzaron los 56.239 millones de pesos, es decir, unos 22.154,8 millones menos que en 2017.
El dinero estuvo direccionado a Vivienda y Urbanismo ($ 23.407,6 millones), Transporte ($ 7.248,4 millones), Agua Potable y Alcantarillado ($ 5.405,7 millones) y Educación ($ 5.528,2 millones).
Menos plata para casas y caminos
En el caso de Mendoza, las trasferencias del Fondo Nacional de Vivienda (Fonavi) y la coparticipación vial cayeron nominalmente respecto de 2017. "Nos afectaron las modificaciones ocurridas en el impuesto a los combustibles en marzo del año pasado", dijo la ministra de Hacienda, Paula Allasino. Este tributo es de donde se nutren el Fonavi y los recursos para caminos. La modificación incluye un beneficio a productores agropecuarios que compran gasoil para sus labores.
En el caso del Fonavi (recursos destinados al IPV), en 2017 Mendoza recibió 252,1 millones de pesos, mientras que el año pasado llegaron 197,3 millones, es decir que hubo una caída de 54,8 millones. La nominal fue de -23%, mientras que la real (descontando inflación) fue de -49%.
En el caso de los fondos viales, que administra la Vialidad Provincial, en 2017 las transferencias llegaron a 282,8 millones de pesos, mientras que en 2018 ascendieron a 282,1 millones, es decir unos 700 mil pesos menos. En términos nominales el porcentual de caída es despreciable, pero considerando los cambios en el índice de precios al consumidor de la DEIE, la reducción llega al 53%.