Política
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hace 7 horas
El hombre que supuestamente mató de un disparo en el pecho al policía Jonathan Funes (24) durante el rescate de un detenido internado en el hospital Perrupato de San Martín fue detenido este mediodía mientras caminaba por la calle en Dorrego, Guaymallén.
Javier Arturo Carnevalini (40) era intensamente buscado desde la tarde del 14 de febrero pasado, cuando se lo acusa de haber llegado junto a otro sujeto a la sala 34 del centro asistencial donde estaba internado Cristian "Pirincho" Tapia y disparar contra el uniformado que lo custodiaba.
Luego de intensas averiguaciones, los investigadores sorprendieron minutos después de las 13 a Carnevalini en la esquina de Dorrego y Adolfo Calle cuando caminaba.
Si bien intentó desligarse del hecho del que se lo acusa, fue arrestado por la Policía. Unos minutos más tarde se libró un allanamiento en la vivienda donde supuestamente se refugiaba el sospechoso, ubicada en Dorrego al 140.
En el lugar los sabuesos no hallaron armas que lo vincularan con el asesinato a sangre fría del efectivo, pero la fiscal Florencia Díaz Peralta confía en las investigaciones realizadas para dejarlo tras las rejas.
Fuga y asesinato
El auxiliar Funes recibió un disparo en la zona intercostal y fue operado de inmediato en el mismo centro asistencial del Este, aunque murió minutos más tarde, lo que produjo una gran conmoción en la fuerza. Para los pesquisas Carnevalini fue quien apretó el gatillo.
Según algunos testigos, los tres sujetos se subieron a un Honda Civic de color gris, sin patente y huyeron con rumbo desconocido. Ese vehículo fue encontrado unas horas más tarde junto a otros que habrían sido robados por la banda del “Pirincho”.
Tapia y otros de los sospechados de participar de la fuga y asesinato del uniformado, fueron detenidos al día siguiente del sangriento hecho tras una redada que incluyó el uso de Cuerpos especiales de la Policía.
"El Pirincho" fue apresado esa tarde en un camping de la zona de Blanco Encalada, donde también aprehendieron a otras cuatro personas que lo acompañaban, entre ellas una enfermera que le curaba una herida en la ingle supuestamente producida durante un tiroteo, por la que había sido internado en el Perrupato. Jordan Luciano Tapia -hermano del fugado- la madre, otra mujer y un amigo también cayeron esa tarde.
Faltaba dar con Carnevalini quien, a casi un mes del conmocionante asesinato, fue detenido mientras caminaba tranquilamente por la calle y trasladado al Centro Transitorio de Detención.
Pero el caso parece no estar cerrado ya que los investigadores están tras los pasos de dos sospechoso más que estarían vinculados con el operativo de rescate y posterior homicidio del joven policía.
