El organismo rector del fútbol confirmó ayer la fecha del último partido de la competencia deportiva más vista en el planeta, cuatro años después que otorgó la sede al pequeño emirato del Golfo Pérsico en una polémica votación.
Finalmente, Catar y el resto del fútbol saben el día exacto que terminará el torneo, después de una investigación sobre supuesta corrupción en el proceso de candidaturas, y tras soportar las críticas, especialmente de Europa, por cambiar el Mundial de sus tradicionales fechas de junio y julio.
En más de siete años, dos equipos jugarán sobre el césped del estadio Lusail, que todavía no se construye y estará ubicado cerca de Doha, para decidir el campeón mundial. Los cataríes consideran el 18 de diciembre como su fiesta nacional, en conmemoración del día que el país fue fundado en 1878.
"Es un domingo, y también es el día nacional de Catar, y sí, en principio, trataremos de jugar en 28 días'', dijo el vocero de la FIFA, Walter De Gregorio, al confirmar la decisión del comité ejecutivo en su primera sesión de una reunión de dos días.
Si el torneo se juega en 28 días, empezaría el lunes, 21 de noviembre, y duraría cuatro días menos que de costumbre.
Ese cronograma podría ser confirmado el viernes, agregó De Gregorio en la sede de la FIFA.
El anuncio acaparó la atención en una jornada que la FIFA esperaba que estuviese dedicada al fútbol de mujeres, tras otorgar la sede del Mundial de 2019 a Francia.
Cuando consiguió la sede en diciembre de 2010, Catar se comprometió a organizar el torneo en las tradicionales fechas de junio y julio con estadios climatizados.
Sin embargo, el presidente de la FIFA Joseph Blatter y otros funcionarios empezaron a insistir en 2013 que habría que cambiar las fechas a meses más fríos para proteger la salud de los jugadores, fanáticos y empleados del torneo.
La alternativa de jugar el campeonato en noviembre y diciembre era esperada, después que fuese recomendada por una comisión especial de la FIFA que se reunió el mes pasado en Doha.
Los clubes y ligas europeas, que tendrán que interrumpir sus torneos durante varias semanas a mitad de temporada, han sido los principales opositores a las fechas de fin de año.
"Es un paso importante, porque finalmente sabemos y podemos seguir adelante'', dijo De Gregorio.