El histórico Castillo de Játiva se emplaza a 72 kilómetros de la ciudad de Alicante, España. Se puede acceder por tren en coche y bus. Su ubicación estratégica en lo alto del cerro Vernisa lo convirtió en un bastión fundamental para los íberos, los romanos y los árabes que ocuparon España bajo el mando de Al-Andalus.
Se distingue su silueta desde el camino a varios kilómetros de distancia ya que se encuentra a 300 metros de altura. En 2008 fue elegido como una de las Siete Maravillas de la Comunidad Valenciana. En la base del cerro se puede acceder a la fortaleza en el mismo coche, en un tren turístico o, si se está en buena forma, a pie. Tras abonar el ticket, se ingresa por la Porta Ferrissa (Puerta de Hierro) que es la entrada principal. De ahí a la Plaza de Armas donde se eligen dos opciones: comenzar el recorrido por el Castillo Menor, hecho por los ibéricos o por el Castillo Mayor de corte islámico.
El más antiguo es el Menor. Aquí estuvo el General Aníbal al mando de las tropas romanas y en este sitio nació su hijo Aspar fruto de su relación con la Princesa Himilce en el año 218 A.C. Caminando por senderos se accede a la Puerta de Aníbal, la Torre Cuadrada y a la Torre de Himilce donde residía la noble dama.
Desde su balcón la vistas vistas son estupendas. Se domina la ciudad de Játiva, las sierras y se alcanza a ver el límite entre la Comunidad Valenciana y la de Castilla hacia el oeste.
El Castillo Mayor se erigió posteriormente y lo orientaron hacia el poniente. Lo construyeron los árabes quienes fueron sus habitantes naturales hasta que fueron vencidos por el cristiano Jaume I. Pasó a tener importancia estratégica para defender al Reino de Valencia. Está mejor conservado que su vecino más pequeño.
En él se puede observar la Puerta del Socorro, los cuatro aljibes que almacenaban el agua, fundamental para la supervivencia dentro de la fortaleza, la Puerta de Santa María y la capilla de la Reina María de Castilla erigida en el siglo XV.
En su interior descansan los restos del Conde de Urgel, el preso más célebre que tuvo esta fortificación. Este noble y militar se enfrentó en 1413 al poderoso Rey Fernando de Aragón en lo que fue una revuelta interna que finalmente fue sofocada por el Monarca y su ejército. El Conde de Urgel fue detenido y comenzó una peregrinación entre distintas cárceles de hasta que llegó a Játiva en 1426 donde falleció en 1433 a los 53 años.
Su celda está bastante bien conservada como así también las mazmorras donde habitaron otros presos. Permanecer un rato dentro de ellas da un poco de claustrofobia por lo reducido del tamaño y por lo ancho de los impenetrables muros de piedra que los aislaban del mundo exterior.
Cuenta la leyenda que el Conde murió un día cuando salió por primera vez al sol tras permanecer en un prolongado encierro. Cuando miró la resplandeciente luz emitida por el disco solar quedó ciego y expiró ahí mismo. Fue enterrado en la capilla mencionada anteriormente. Las murallas que protegen la fortaleza están construidas al borde del precipicio y algunos tramos me recordaron a la Muralla China aunque en menor escala.
Tiempo después le fueron agregando otras construcciones para embellecer el castillo y hacerlo más funcional. Los jardines de Ibn Hazm dedicados a este poeta andalusí destacan por su fuente y sus arboledas.
Un lugar ideal para sentarse a descansar luego de tantas subidas y bajadas. Para disfrutar algo fresco, comer o tomar un café se puede hacerlo en el restaurante ubicado en lo más alto con vistas panorámicas de todo el entorno.
Además del castillo, se recomienda una visita a la misma ciudad de Játiva, un tranquilo pueblo de 30 000 habitantes y orgulloso de su pasado. La celebración anual de la fiesta de Moros y Cristianos es un momento importante para varias ciudades de esta zona y la celebran por todo lo alto. El casco antiguo de Xátiva (en idioma valenciano) fue declarado Conjunto Histórico-Artístico en 1982. El Museo del Palacio Almudín, el antiguo edificio del Hospital Real fundado por Jaime I en 1244, la Plaza de la Trinidad y la Ruta de las Fuentes donde se aprecian las 10 fuentes medievales más importantes de la urbe que fuera conocida antiguamente como "La ciudad de las mil y una fuentes".
Datos
- Tren de Alicante a Játiva: 9 dólares.
- Tren a la cima: 5 dólares (subida y bajada).
- Entrada al Castillo: 4 dólares
Abierto diariamente de 10 a 19 horas en verano y de 10 a 18 hs en invierno (Cierra los lunes).
- Restaurante "El Mirador del Castell": desde 12 dólares una comida.
- Museo del Almudín: 3,5 dólares.