Sebastián Prado (36), un médico que trabajaba en el hospital Central, fue muerto a tiros cuando intentaba subir a una camioneta Duster, frente a su vivienda de López de Gomara al 700, a metros de calle Perú en la Cuarta Sección.
Fue en la noche del viernes 6 de setiembre cuando un delincuente intentó robar el vehículo y sin medir palabras le disparó. La bala impactó en el pecho del médico que murió en el hospital Lagomaggiore, adonde había sido trasladado en el vehículo de un familiar.
Casi un mes antes (viernes 9 de agosto), la víctima de esta sin razón de la violencia fue el abogado Marcos Derpich (46).
El criminal le disparó posiblemente desde la puerta o ventanilla de la camioneta Suzuki, cuando detuvo la marcha en Boulogne Sur Mer y Las Tipas, en Godoy Cruz.
Por ambos hechos fueron establecidas importantes sumas de recompensa y curiosamente en ambas investigaciones hubo aprehensiones casi inmediatas, pero al término de las investigaciones ambos casos terminaron sin culpables y hasta hoy los hechos continúan impunes.