A poco más de un mes del comienzo del caso por violencia de género, la semana cerró con las declaraciones de los dos primeros testigos aportados por Sebastián Villa y pericias en la casa que el jugador de Boca compartía con su ex pareja en el barrio Saint Thomas de Ezeiza, en la causa que lleva adelante la fiscal Verónica Pérez, de la UFI 3 de Esteban Echeverría.
Los testigos que declararon ante la fiscal, en presencia de los abogados Martín Apolo y Fernando Burlando, fueron el representante de Villa, Rodrigo Riep, y el primo y asistente de Juan Fernando Quintero, Brian Alvarez Acero.
A ?Alvarez Acero la defensa lo considera clave porque asegura no haber visto golpeada a Daniela cuando esa noche del 27 de abril acompañó a Villa a buscar su pasaporte a su casa, esto aproximadamente media hora después de la pelea que derivó en la separación y la denuncia.
A la vez, el viernes se realizaron pericias en la casa que compartía la pareja en Ezeiza para constatar una puerta que Cortés habría roto a golpes esa misma noche, mientras Villa se encontraba encerrado en la habitación luego de una pelea.
Anteriormente, habían declarado Cortés y sus testigos (la hermana y una amiga), y luego lo hizo el propio Villa.
A continuación, algunas frases de los testigos de Villa:
BRIAN ALVAREZ ACERO
"Villa y Juanfer tienen el mismo representante, y yo lo fui a recoger a su casa porque dijeron que había tenido un inconveniente".
Apolo le preguntó a Alvarez Acero si cuando acompañó a Villa a buscar el pasaporte a la casa que compartía con Cortés observó que ella había sido golpeada. "La verdad que (Daniela) no tenía absolutamente nada. Yo estaba a tres o cuatro metros de distancia y ella, de la puerta para adentro en una zona demasiado iluminada".
Burlando preguntó al testigo si tenía problemas de visión y también por detalles de la vestimenta de Cortés. "Tenía el pelo recogido", dijo Acero, por lo que dejó en claro que pudo verle la cara.
"Cuando nosotros salimos para la casa a buscar el pasaporte, Juanfer llamó a Daniela y me avisó que no había problemas, que fuéramos. Ella no se sorprendió cuando volvimos".
RODRIGO RIEP
"La chica (Cortés) vino y estuvo uno o dos meses y se fue, iba a y venía, estaban unos meses acá y unos meses allá, tenían ese ida y vuelta permanente, hasta que en un momento como todas las cosas de pareja o de noviazgo, se peleaban y se perdían cinco meses y después volvía un mes, era todo una cosa así".
"Más o menos febrero o mediados de febrero y un día me llama y me dice: 'Viene Daniela, yo la amo, sé que tenemos muchas diferencias pero quiero solucionar esto, ella me está pidiendo que le dé una oportunidad. La chica llegó y a los pocos días se declaró esta cuarentena, y se quedaron encerrados los dos. Al mes Sebastián empieza a llamar que la estaban pasando mal, que la convivencia no la aguantaba más con ella, que se quería ir y que se quería separar".
"Las discusiones arrancaban porque Daniela se había llevado 400.000 pesos de un millón que había retirado Sebastián del banco para pagar la cuota de su auto".
Ya sobre la noche de la denuncia, Riep contó: "Sebastián me llama haciendo una videollamada. Yo lo único que escuchaba era 'a mí no me vas a dejar hijo de puta negro mal parido gonorrea' y distintos insultos hacia él, yo le decía que se tranquilizaran (...) Cuando llegó a lo de Juanfer me contó que se encerró en la habitación y ella le pateaba la puerta".
"Pasan dos horas más o menos y vemos este tipo de posteo, me llama desesperado, asustado, diciéndome que 'cumplió con las amenazas que me hizo de destruirme la carrera, mirá lo que hizo' (...). Le estaba haciendo todo lo que había dicho que le iba a hacer, que lo iba a destruir. Y me aseguró que nunca la agredió ni la tocó".
"En la videollamada no vi ninguna marca o señal que puede interpretarse como golpe en su rostro y tampoco que Sebastián la haya tomado de los brazos durante una discusión".
Si sos víctima o conoces a alguien que sufra violencia de género llamá al 144 las 24 horas.
