El caso Próvolo sigue tejiéndose sobre un complejo y enredado telar. No sólo porque todos los abusos fueron divididos en 3 causas separadas para llegar a juicio (hay más de 20 ex alumnos del instituto religioso para chicos sordos que denuncian haber sido abusados), sino porque además siguen surgiendo detalles llamativos.
Un hombre de 35 años -que estudió y durmió en el instituto entre 1997 y 2008- declaró ayer en cámara Gesell y comprometió a otro cura que vivió durante años en el establecimiento: el italiano José Luis Spinelli (falleció en 2016) quien, al igual que Nicola Corradi, llegó a Argentina con denuncias por abusos sexuales contra ex alumnos del Próvolo en Verona. Sin embargo, José Luis Spinelli no se encuentra entre los denunciados en Mendoza.
A.S. (según sus iniciales) dijo que al menos en una oportunidad le contó al "padre José" (Spinelli) sobre los abusos que sufrió en el lugar. Sin embargo, sostuvo que el religioso no tomó ninguna medida ni dio aviso sobre la novedad. Y agregó no saber si dicha inacción se basó en que el religioso no entendió lo que se le estaba contando o simplemente fue para ocultarlo. Además, el denunciante manifestó que "le tenía miedo a Corradi".
El hombre vive en Villa Mercedes (San Luis), pero regresó a Mendoza para declarar. Sufrió abusos sexuales directos (simple y violación) perpetrados por el otro ex administrativo que fue sobreseído por inimputabilidad.
Al igual que ocurrió con la joven trans que declaró el martes en la misma modalidad (ver aparte), A.S. fue citado para brindar testimonio sobre hechos diferentes a los que lo tienen como víctima y que pudiesen involucrar a los curas Nicola Corradi y Horacio Corbacho, y al ex jardinero Armando Gómez, quienes están siendo enjuiciados por estos días.
No acusó a ninguno de ellos como autores o partícipes de los hechos, pero detalló que en los albergues del instituto no habían rejas en las ventanas. Incluso, sostuvo que en una oportunidad observó a un ex alumno escaparse del lugar saltando por las ventanas (las habitaciones estaban en un primer piso).
"Hizo mención a muchas actitudes extrañas y que daban indicios de que algo estaba ocurriendo dentro del instituto; más allá de que no habló de ninguna víctima en particular", explicó el abogado querellante Oscar Barrera al final de la jornada.
La particular situación de otra testigo
A.M (25) permaneció 2 horas en cámara Gesell el martes pasado. Lo hizo aportando detalles sobre las pesadillas que vivió mientras estudiaba y dormía en el instituto.
Si bien la joven trans fue abusada sexualmente por el ex monaguillo Jorge Bordón (condenado el año pasado por estos hechos), fue citada para que aportara información de hechos denunciados por otros ex alumnos y que pudiesen vincular a Corradi, Corbacho o Gómez. Sin embargo, sólo pudo declarar durante 20 minutos.
La entrevista no culminó el martes; ni tampoco ayer. De hecho, hay muchas posibilidades de que esta cámara Gesell quede inconclusa. Es que si bien se esperaba que el tribunal definiera qué preguntas se le harían llegar por medio de los especialistas del Cuerpo Médico Forense a la víctima y testigo, la perito oficial que estaba entrevistándola hizo saber a los jueces que la joven "no está en condiciones de seguir declarando como víctima".
El tribunal aguardará el envío del informe para definir. "Mañana (por hoy) va a resolver el tribunal, pero la psicóloga ya adelantó que no está en condiciones de seguir declarando. En estas circunstancias hemos pedido que si no puede continuar, se incorpore la cámara Gesell de la que participó durante la instrucción y que fue filmada", agregó Barrera.
Sepa Más
Declararán 15 víctimas "en vivo" por cámara Gesell
Los testimonios del hombre de 35 años ayer y de A.M. (25) el martes no serán los únicas que se registrarán en cámara Gesell durante el juicio contra los dos curas y el ex jardinero. En total se espera que 15 denunciantes sean entrevistados "en vivo" durante el debate, y todos de la misma forma. A ellos se sumarán otras 15 declaraciones registradas en cámara Gesell, aunque durante la instrucción. En el caso de estas últimas, se las reproducirá durante las audiencias, teniendo en cuenta que fueron grabadas oportunamente.
Los jueces autorizaron que se reproduzcan estas filmaciones audiovisuales ya filmadas con la intención de evitar la revictimización. No obstante, permitieron también que en algunos casos puedan solicitarse nuevas entrevistas.