Caso Piottante-Libedinsky: tras el único sospechoso

Policías se llevaron elementos de la casa del prófugo Mauricio Suárez y de la de su ex pareja. El fiscal Garay llevó adelante las medidas.

Caso Piottante-Libedinsky: tras el único sospechoso
Caso Piottante-Libedinsky: tras el único sospechoso

Personal de la división de Delitos Tecnológicos de la provincia está periciando los elementos hallados en la casa de los padres y de la ex pareja de Mauricio Suárez, el hombre buscado desde hace seis años por los homicidios del psicólogo Flavio Piottante (39) y su paciente, Analía Libedinsky (31). Los resultados se esperan para los primeros días de enero.

El material surgió de allanamientos realizados el miércoles por la mañana en la casa de los padres del sospechoso -viven en Las Heras- y de su ex pareja, Andrea Troncoso -vive en Luján-, quien cuando ocurrió el doble crimen tenía una relación amorosa con el psicólogo.

La intención de los pesquisas es hallar material que dé cuenta de dónde se esconde Suárez. En los allanamientos se secuestraron computadoras, celulares y otros soportes tecnológicos, como así también documentación que podría ser relevante para la causa.

La medida fue ordenada por el fiscal especial Santiago Garay, quien quedó a cargo de la investigación después de que Eduardo Martearena dejara la fiscalía para pasar a ser juez de la Tercera Cámara del Crimen.

Doble homicidio

El crimen ocurrió el 12 de julio de 2006 en la casa del psicólogo, en Barcala al 400 de Ciudad.

Hasta ese lugar había llegado  Libedinsky, que era paciente de Piottante, quien además trabajaba como psicólogo en la cárcel de Boulogne Sur Mer. Justamente en el penal conoció y empezó una relación con su colega Andrea Troncoso.

La mujer estaba separada de Suárez, con quien había tenido un hijo. Este vínculo llevó a Suárez, que se convirtió en principal sospechoso después de que en una reunión de amigos  confesara que se había mandado una “cagada”.

A las pocas horas su departamento de Ciudad fue requisado por la Policía, pero ya estaba vacío. Para entonces ya habían pasado cuatro días de los homicidios y Suárez había desaparecido.

A su “confesión” se sumaron el rastreo de dos llamadas que se hicieron desde su celular en el radio donde fueron los homicidios y huellas de una zapatilla halladas en la escena del crimen que corresponden a su número de calzado.

Su auto fue encontrado cerca de la Terminal.

Tenemos algo para ofrecerte

Con tu suscripción navegás sin límites, accedés a contenidos exclusivos y mucho más. ¡También podés sumar Los Andes Pass para ahorrar en cientos de comercios!

VER PROMOS DE SUSCRIPCIÓN

COMPARTIR NOTA