La defensa de Jorge Mangeri, condenado a prisión perpetua por el crimen de Ángeles Rawson (16), cometido en 2013 en Palermo, apeló el fallo ante la Cámara Nacional de Casación y pidió su absolución al entender que el tribunal que lo sentenció fue "arbitrario" y que el juicio fue "una puesta en escena".
La defensa encabezada por el abogado Adrián Tenca basó la apelación en tres ejes: la nulidad de la revisión corporal a la que Mangeri fue sometido en la fiscalía la noche de su detención, que ya había sido planteada durante el debate. A esto le sumó la nulidad de los estudios de ADN y la absolución por el beneficio de la duda.
Tenca también cuestionó la calificación por la que su cliente fue condenado a prisión perpetua al considerar que no hubo abuso sexual y por lo tanto no se trató de un homicidio agravado por criminis causa, y que tampoco se configuró la figura del "femicidio".
Para Tenca, el juicio realizado entre febrero y julio pasados por el Tribunal Oral en lo Criminal 9 tuvo fue una formalidad para "aplicar a Mangeri la condena y la calificación que el Tribunal ya tenía impuesta antes de su comienzo".
El defensor puso el foco en la inspección corporal los actos procesales posteriores que se hicieron sobre Mangeri la madrugada del 15 de junio de 2013, cuando fue llevado a declarar a la fiscalía como testigo y, tras una serie de contradicciones y de una autoincriminación, terminó preso por el homicidio.
Tenca sostiene que cuando la fiscal de instrucción Paula Asaro le pidió a Mangeri que le exhibiera el torso, no fue porque el portero le contó que sufrió apremios sino porque "sospechaba de él" y calificó aquella testimonial como una "emboscada estatal". "La investigación del delito de apremios sirvió como una vil excusa para confirmar una corazonada que, como tal, carece de toda motivación en los elementos objetivos de la investigación", señala el defensor.
Sobre la nulidad del ADN, Tenca volvió a plantear que "las muestras de referencia (de Mangeri y Ángeles) y de evidencia (hisopados subungueales) se procesaron de manera conjunta, lo que está total y absolutamente prohibido por todos los protocolos internacionales porque hace posible una contaminación cruzada".
Asimismo cuestionó la afirmación de los jueces acerca de que el crimen se produjo en el edificio donde vivían las víctimas, ya que considera que no hay pruebas al respecto.